En medio de la crisis humanitaria que se vive en Gaza por la guerra, han muerto más de 4.000 niños, y el secretario general de la ONU, António Guterres, calificó el territorio como «un cementerio de niños».
El jefe de Naciones Unidas, ofreció estas declaraciones mientras aumenta el número de muertos y crecen los llamados en todo el mundo para un alto el fuego.
«La pesadilla de Gaza es más que una crisis humanitaria. Es una crisis de humanidad», declaró a la prensa en Nueva York, a la vez que añadió que la necesidad de un alto el fuego es «más urgente cada hora que pasa».
La reflexión de Guterres se produce cuatro semanas después de que Israel declarara la guerra a Hamás, tras el brutal ataque del grupo militante islamista del 7 de octubre en el que murieron 1.400 personas en Israel y otras 240 fueron secuestradas, refiere CNN.
La devastación causada por los ataques de Israel contra Gaza se está haciendo patente ahora, y el Ministerio de Sanidad del enclave, controlado por Hamás, declaró este lunes que más de 10.000 personas han muerto desde el comienzo de la guerra. Entre ellas, más de 4.100 niños y 2.600 mujeres, afirma la cadena de noticias.
Cifras a un mes del ataque
Según datos publicados en los medios de comunicación internacional, alrededor de 1,5 millones de habitantes de Gaza están desplazados, es decir 70% de la población, y la mayoría vive hacinada en refugios de la ONU.
La información la ofreció este lunes Tamara Alrifai, portavoz del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (OOPS).
Los cuerpos en descomposición atrapados bajo los edificios derrumbados también representan un riesgo para la salud de los supervivientes.
