Debido a la crisis energética que ha afectado a la mayoría de los países europeos, se han establecido en Reino Unido, más de 3.200 “bancos de calor”, para las personas que no pueden costear la calefacción en sus hogares.
Operadas por autoridades locales y organizaciones sin fines de lucro, estos espacios brindan varias áreas cómodas con calefacción, para que los ciudadanos puedan acudir durante el día para estar calientes y así evitar pagar los altos costos de la electricidad.
Debido al comienzo de la temporada de invierno, algunas regiones del país europeo pueden registrar temperaturas de hasta -10 grados centígrados.
Estos espacios que ofrecen un ambiente seguro y abrigado, pueden ser instalados en iglesias y bibliotecas. Allí además sirven alimentos, bebidas calientes y ofrecen acceso a Internet.
El gerente de la asociación Wandsworth Libraries, Daniel Andrews, aseguró que desde que se instalaron estos “bancos de calor” se ha registrado un aumento significativo de visitantes.
Por su parte, el grupo Warm Welcome, que ofrece a las personas espacios cálidos en sus locales, detalló en un comunicado que equiparán más espacios gratuitos, que brinden calor y confort a lo largo y ancho del país.
“Creemos que todo el mundo debería tener un espacio cálido y acogedor al que acudir este invierno, por lo que nuestra red de organizaciones comunitarias, iglesias, bibliotecas, empresas y otros grupos religiosos en todo el Reino Unido, han abierto sus puertas para ofrecer exactamente eso”, precisó el grupo.
Ante el alto costo de la electricidad, el gerente de Warm Welcome, David Barclay, criticó que las personas se vean obligadas a decidir entre calentar sus hogares o comer.
Barcaly advirtió que, debido a esta crisis, cientos de personas con bajos ingresos están en riesgo durante los días con temperaturas extremadamente bajas que afectan al país.
En octubre las familias británicas se enfrentaron a un aumento del 65% en sus facturas de energía, lo que representó más de 4.300 dólares al año, versus las que experimentaban en octubre de 2021, cuando el gasto se situaba en sólo 1.700 dólares al año.
En el mes de diciembre, el precio de la luz alcanzó los 900 dólares/MWh, lo que lo convierte en el país con el servicio de energía eléctrica más costoso.
En este sentido, una reciente publicación de YouGov, afirma que sólo uno de cada seis británicos enciende la calefacción en sus hogares de manera continua.
La crisis energética del Reino Unido y Europa aumentó durante los últimos meses, en parte por la reapertura de las economías posterior al Covid-19, aunque también coincidió con la reducción del suministro de gas ruso a Europa por el conflicto bélico en Ucrania.