Cientos de miles de palestinos manifestaron en Gaza para marcar el aniversario 35 del grupo Hamas, mientras los líderes predijeron un año de "confrontación abierta" con el gobierno israelí.
Hay que recordar que Hamas tomó el control del enclave de manos de las fuerzas leales al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, cuya administración ha estado confinada a la Cisjordania ocupada por Israel.
Desde que Hamas tomó el control, Israel y Egipto han mantenido un bloqueo a Gaza y controlan estrictamente el movimiento de personas y bienes dentro y fuera del territorio. La economía local se ha ido en picada y el territorio ha librado cuatro guerras y numerosas escaramuzas.
Más de 150 palestinos han sido asesinados por Israel en Cisjordania y el este de Jerusalén este año, lo que lo convierte en el año más mortífero desde 2006.
Israel dice que la mayoría de los muertos eran militantes, aunque también han muerto jóvenes que arrojan piedras y personas que no participan en los combates.

Los críticos señalan a los líderes de Hamas de mejorar continuamente su arsenal y desviar dinero hacia su administración y ala militar, mientras que la comunidad internacional y la Autoridad Palestina pagan la mayor parte de los servicios de salud, educación, sociales y otros para la población de Gaza.
El gobierno de mano dura de Hamas no deja lugar para la oposición y el grupo prohibió las protestas en su contra y encarceló a los críticos.
Sin embargo, una encuesta realizada este mes por el Centro Palestino para la Investigación de Políticas y Encuestas, encontró que Hamas sigue siendo más popular que el partido Al Fatah de Abbas en la Franja de Gaza.
La misma estadística arrojó que el 43% de los encuestados votaría por Hamas en una elección parlamentaria, en comparación con el 34% por Fatah.
Aún así, la encuesta encontró que sólo el 6% de los habitantes de Gaza piensa que la situación en el territorio es positiva y el 69% cree que las instituciones dirigidas por Hamas sufren corrupción.