200 millones de nigerianos se quedaron a oscuras por unas 12 horas, después que trabajadores de la empresa eléctrica cortaran el servicio este miércoles, como parte de una huelga donde exigían el pago de prestaciones salariales y otras mejoras laborales.
El apagón afectó a todo el país porque los protestantes desconectaron “varias líneas de transmisión de 330 kilovoltios y líneas de alimentación de 33kV en toda la red del sistema eléctrico (…) lo que resultó en muchos aumentos de voltaje en estaciones y subestaciones cruciales”, tal como informó en un comunicado, Ndidi Mbah, vocero de la compañía.
Fin de la protesta
Las acciones fueron tomadas por el Sindicato Nacional de Empleados de Electricidad de Nigeria (NUEE), cuyo secretario Joe Ajaero, informó que la medida de presión ejerció resultados. Se puso fin a la protesta tras la urgente reunión con el ministro de Trabajo, Chris Ngige en la que se dispuso establecer una comisión de investigación para hacer seguimiento a la queja de los empleados y en la que participará el ministro de Energía, Jeddy Agba.
A pesar del acercamiento, Ajaero advirtió que de no existir avances concretos en sus peticiones, retomarán la protesta aunque consideraron la intervención del gobierno como algo muy positivo.
La huelga inició en la capital, Abuya, específicamente en la sede de la Compañía de Transmisión y aunque se esperaba el apagón anunciado el martes, no se advirtió del alcance del corte del servicio hasta el miércoles.
Sin servicio
Según información del Banco Mundial, “el 43% de la población nigeriana, no tiene acceso a electricidad, lo que convierte a Nigeria en el país con el mayor déficit en el acceso a energía del mundo”.
El ente señaló que anualmente el país pierde alrededor de 26 millones de dólares por estas deficiencias en el servicio, que afectan tanto a empresas públicas y privadas, como a los ciudadanos.
