Las autoridades de Burkina Faso suspendieron las emisiones del medio France24 luego de que éstos entrevistaran a un líder yihadista, una medida criticada por Human Rights Watch o HRM, ya que esto “viola el derecho de medios libres e independientes”.
Según la directora de HRM de África, «las autoridades burkinesas deberían levantar la prohibición de las emisiones de France 24 y poner fin a nuevos intentos de silenciar a los medios críticos» porque la situación en ese continente no debería ser excusa para restringir los derechos del pueblo burkinés quienes buscan acceder a información en medios independientes.
La prohibición a la televisora fue anunciada el pasado lunes 27 de marzo luego que las autoridades acusaran a France24 de hacerle una entrevista al líder del grupo yihadista Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), algo que el medio negó rotundamente y afirmó que ellos “nunca le han dado la palabra directamente”.
Los líderes del gobierno afirman que France24 actúa como una agencia de comunicación para los terroristas, además de dar espacios para legitimar sus acciones enviando mensajes de odio.
«Al Gobierno le entristece ver que el líder de una organización terrorista como AQMI, reconocida como tal por toda la comunidad internacional, pueda beneficiarse de la generosidad editorial de France 24 para hablar largo y tendido en antena», afirmó Jean-Emmanuel Ouedraogo, portavoz del gobierno.
Además, el gobierno burkinés al principio de diciembre del año pasado suspendió a la emisora Radio France Internacionale luego de acusarlos de transmitir mensajes de un líder yihadista.
Desde hace meses, en Burkina Faso se han presentado diferentes protestas, todas con un sentimiento fuerte antifrancés, en las que los manifestantes les han pedido a las autoridades que se alíen con Rusia para luchar con los yihadistas.
El pasado 1 de marzo, el gobierno de transición le dió un mes a Francia para que retire todo su personal en servicio, siguiendo un acuerdo de asistencia militar firmado en 1961.
