La investigación sobre el origen del virus del SARS-CoV-2 mejor conocido como la Covid-19 no ha parado, desde hace dos años se llevan adelante estudios exhaustivos sobre su procedencia. El más cercano refiere que el virus pudo haber salido de un laboratorio en EEUU.
La denuncia fue realizada por el economista y analista de políticas Jeffrey Sachs, quien dirige una investigación sobre el virus, desarrollada por la revista médica The Lancet.
“El virus no surgió por razones naturales, sino que salió de la biotecnología de un laboratorio de EEUU por una liberación accidental”, afirmó en una conferencia organizada por el grupo de expertos GATE Center, en España.
Sachs es el encargado de la comisión Covid-19 de la revista y asegura haber manejado pruebas suficientes sobre el tema, por lo que calificó el hecho como un error garrafal.
“Entonces, en mi opinión, es un error garrafal de la biotecnología, no un accidente de un desbordamiento natural”, reiteró.
De igual manera señaló que hasta ahora esto es solo una hipótesis que no es definitiva, sin embargo, aseguró que hay suficiente evidencia para creerlo y destacó que es necesario investigar más a fondo.
Por otra parte, Sachs, lamentó que esta versión “no está siendo investigada, ni en Estados Unidos, ni en ningún lado”.
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Tras esta denuncia, queda en duda lo anunciado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde donde se anunció el pasado 9 de junio que su última investigación sobre los orígenes de la Covid-19 no era concluyente, en gran parte porque faltaban datos de China.
A principios de mayo, Sachs, junto con el profesor de farmacología y terapéutica molecular de la Universidad de Columbia, Neil Harrison, publicaron un artículo en el que se sugería hacer una investigación independiente sobre el origen del virus, refiere El País.
En ese momento alegaban que, hay mucha información importante que se puede obtener de las instituciones de investigación con sede en los EEUU, información que aún no está disponible para un escrutinio independiente, transparente y científico, sino que es una base de datos manejada por el gobierno de EEUU.
Según Sachs y Harrison Neil las bases de datos de virus, las muestras biológicas, las secuencias virales, las comunicaciones por correo electrónico y los cuadernos de laboratorio podrían ayudar a arrojar una definición total sobre el origen de la pandemia.
El virus altamente contagioso se identificó por primera vez en Wuhan, China, a finales de 2019. Luego se propagó rápidamente en el mundo, con varias oleadas cobrando millones de vidas para mayo de 2022, según la OMS.
