El Mundial de fútbol Catar 2022 no ha dejado de estar en la polémica desde el mismo día que le adjudicaron la sede del torneo.
En esta oportunidad las apariciones de la modelo croata Ivana Knoll en los partidos de su selección, ha prendido las alarmas de las autoridades qataríes por los particulares atuendos que confrontan la cultura y las costumbres del país árabe.
Existían precedentes de quejas de los aficionados que iban a asistir al Mundial por la prohibición del consumo de alcohol, la prohibición de muestras de cariño en público, o la penalización de la simbología relacionada con el colectivo LGTBIQ+.
Ahora, el llamado “Fenómeno Ivana” parece traer cola por el éxito de sus publicaciones en las redes sociales, posando en traje de baño en las playas de Doha, y presentándose con diminutos escotes en los estadios del Mundial, acciones que las autoridades consideran “una provocación”.
Sin embargo, los estadios son una especie de zona franca, que están exentos de muchos convencionalismos sociales qataríes. De hecho, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, antes del inicio del Mundial aseguró: “todos son bienvenidos en Qatar, independientemente de orientación sexual, religión o raza”.
Ivana Knoll es una reconocida modelo que fue 'Miss Croacia' y ahora iba camino también de convertirse en 'Miss Mundo'. Sin embargo, lo que parecía ser una simple anécdota por sus atuendos con los colores de su país, se ha transformado en una persecución.
De hecho, muchas de las personas que sacaron sus teléfonos móviles para fotografiar a la joven cada vez que desfilaba por un estadio, lo hicieron para denunciar su comportamiento a las autoridades del país, con la intención de encarcelarla o de que pueda recibir un severo correctivo.
"Solo para su información, no toman la foto porque ella les guste, sino porque no les gusta la forma en la que va vestida, de forma inadecuada para nuestra cultura. Lo pueden confirmar con cualquier qatarí. Es para denunciarla". Esto afirmó Mohammed Hassan Al-Jefairi, un empresario qatarí con influencia en la familia real.
"Nunca tuve miedo de que me detuvieran por ser lo que soy y no creo que pueda hacer daño a alguien llevando un bikini. Y si eso merece ser arrestado, entonces arréstenme a mí", declaró al portal estadounidense TMZ Sports, la modelo croata.
"La gente de Qatar me ha confirmado que puedo llevar lo que quiera. No sabía que mi vídeo en bikini caminando junto al mar iba a ser un asunto tan importante. Todo el país está hablando de ello. Todo el mundo me conoce aquí, pero vi que muchos me aceptaban", agregó la modelo.
Las autoridades qataríes no se han pronunciado todavía en el caso particular de Ivana, aunque sí recordaron que todas las personas debían respetar un código de decoro para garantizar una buena convivencia.
