El exministro de Transporte y Comunicaciones de Perú, Juan Silva, se encuentra prófugo de la justicia luego de que el Poder Judicial ordenara para él una detención preliminar.
Silva es investigado como parte de una presunta mafia dentro del Ejecutivo que, según la hipótesis fiscal, buscaba favorecer a empresas chinas a través de obras públicas en el país, esto a cambio de recibir grandes beneficios económicos.
El exministro aseguraba que no había pruebas que lo vincularan directamente con el empresario Zamir Villaverde -actualmente detenido-. Sin embargo, el 2 de junio salió a la luz la conversación entre ambos donde conversan sobre los 100.000 doláres que había enviado la empresa Tapusa a Silva en un maletín de cuero color negro, efectivo enviado a cambio de que se escogiera el presupuesto de la compañía para el contrato del Puente Tarata.
Los días previos a que se dictara la orden de detención, los cuerpos policiales tenían ubicado al funcionario a través de acciones de inteligencia, y aunque en las últimas semanas, se le vio públicamente en presentaciones tales como la Comisión de Fiscalización del Congreso y en entrevistas radiales, inmediatamente al dictarse la detención preliminar ya se desconocía el paradero de Silva.
El abogado del exministro defiende que su cliente se encuentra en el país, y se quejó de que se dictara una orden de detención cuando ‘’venía colaborando con las investigaciones y estaba citado el 9 y 10 de junio para una diligencia de reconocimiento de voz en los audios’’.