El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, ordenó iniciar los preparativos para el lanzamiento del primer satélite de reconocimiento militar del país, según informó la Agencia Central de Noticias de Corea.
Durante su visita a la Administración Nacional de Desarrollo Aeroespacial (ANDA) este martes, Kim afirmó que el escenario actual llevó a la construcción de un satélite espía militar para tener ventaja en un posible conflicto bélico.
«Presentó la tarea militante de organizar un comité preparatorio de lanzamiento de satélites no permanente para asegurarse de que el satélite de reconocimiento militar No. 1 completado en abril sea lanzado en la fecha prevista», indicó el medio estatal.
El líder norcoreano instó a agilizar los preparativos finales para el lanzamiento y establecer un equipo especializado que pueda analizar la recopilación de datos y en un futuro consolidar la inteligencia militar a través de decenas de satélites de reconocimiento.
Kim volvió a criticar los ejercicios militares realizados por Corea del Sur y Estados Unidos y advirtió que si Washington establece una base de avanzada en Seúl sufrirán las consecuencias.
«La posesión de dicho satélite es una tarea primordial que debe cumplirse indispensablemente para reforzar las fuerzas armadas de la República Popular Democrática de Corea que nunca puede ser abandonada, perdida o cambiada, y pertenece a su soberanía y derecho legítimo a la autodefensa en vista de los requisitos del entorno de seguridad reciente en la península de Corea y la lucha contra las amenazas a largo plazo», puntualizó Kim.
Las tensiones en la península de Corea han escalado debido a las recientes pruebas de misiles de Pyongyang.
Sin embargo, expertos del área afirman que a pesar que el país de Asia Oriental ha logrado lanzar con éxito misiles y cohetes, el éxito de este proyecto puede verse mermado si cuentan con cámaras lo suficientemente sofisticadas como para labores de espionaje en órbita.
Pruebas previas con misiles y cohetes han mostrado que Pyongyang puede enviar satélites al espacio, pero muchos expertos dudan de si cuenta con cámaras lo suficientemente sofisticadas como para labores de espionaje en órbita.