La Organización de las Naciones Unidas (ONU) denunció el recrudecimiento este año de los ataques de los grupos rebeldes del este de la República Democrática del Congo (RDC) y el aumento «alarmante» de la violencia sexual, tras registrar más de 6.600 violaciones en una sola provincia en tres meses.
«Estamos particularmente alarmados por los crecientes informes de violencia sexual contra mujeres y niñas desplazadas, incluido violaciones y explotación sexual», señaló la alta comisionada adjunta de Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) especializada en cuestiones de protección, Gillian Triggs.
Según un comunicado de Acnur para la RDC, más de 10.000 personas usaron los servicios para los supervivientes de la violencia de género en la provincia de Kivu del Norte durante el primer trimestre de este año.
Muchos de los perpetradores eran hombres armados, indicó Acnur, reseñado por EFE.
«Creemos que esto sólo es la punta del iceberg por varias razones. Es posible que muchos supervivientes no tengan acceso a esos servicios», reconoció Triggs.
La ONU hizo un llamado al Gobierno de la RDC y a las autoridades locales para «combatir esta impactante epidemia de violencia de género».
Hay que recordar que desde 1998 el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por las milicias rebeldes y el Ejército, pese a la presencia de la misión de la ONU en la RDC (Monusco), con unos 16.000 uniformados sobre el terreno.
La ausencia de alternativas y métodos de subsistencia estables han empujado a miles de congoleños a tomar las armas y, según el Barómetro de Seguridad de Kivu (KST, en sus siglas en inglés), el extremo oriental de la RDC es campo de batalla de unos 120 grupos rebeldes.
Sus ataques han obligado a más de 6,3 millones de personas a abandonar sus hogares y ahora están internamente desplazadas, según Acnur.