Este lunes la policía tailandesa entregó a la Fiscalía el informe final de la investigación sobre el asesinato y descuartizamiento del médico colombiano Edwin Arrieta por parte del español Daniel Sancho, así lo informó EFE.
“Tenemos suficientes pruebas para que un tribunal lo condene. Esto no fue un accidente, quería matarlo porque hubo una compra de cuchillos y un hacha”, dijo el subdirector de la policía, Surachate Hakparn.
La Fiscalía de Samui confirmó que recibió el informe por parte de la policía, tras dos meses de investigaciones, que incluyeron testimonios del confeso homicida.
El siguiente paso es esperar el informe de la Fiscalía que debe ser entregado al tribunal de Samui, antes del 28 de octubre, y a partir de allí el juez podrá fijar la fecha para la celebración del juicio.
Las autoridades policiales tenían un plazo de 84 días para preparar el caso desde que Sancho pasó a disposición judicial el pasado 7 de agosto. En aquel momento, un juez provisional decretó prisión provisional para el español tras presentar los cargos por «asesinato premeditado y ocultación del cuerpo», que el acusado aceptó.
Bajo la ley tailandesa, el asesinato premeditado puede terminar en una condena de muerte, aunque el reino asiático casi no aplica estas sentencias. La última ejecución se remonta a 2018.
Aún se desconoce si el informe final mantiene las mismas acusaciones; el proceso se ha visto empañado por que la cara visible de la investigación, el oficial Surachate Hakparn, está siendo investigado por presunta corrupción en otro caso.
La investigación preliminar involucró a más de 30 personas, entre agentes, investigadores, forenses y buzos, además de 20 testigos.
