Este jueves, el presidente de Brasil Luiz Inácio Lula Da Silva, inicia su viaje a Estados Unidos para tener su primer encuentro oficial con su homólogo estadounidense Joe Biden.
Da Silva será recibido en la Casa Blanca en la tarde del viernes 10 de febrero por Biden y hay un abanico de temas sobre la mesa que podrían abordar los mandatarios.
Para Michael Arslanian Neto, responsable del Departamento de América Latina y Caribe de la cancillería brasileña, «lo más destacable de esta visita es su carácter político, el hecho simbólico de que ocurre al inicio del mandato del presidente Lula».
Arslanian, además agregó que la reunión es una excelente oportunidad para un encuentro más personal pero sin dejar a un lado que se trata de una reunión de súper alto nivel que dará pie a nuevas relaciones entre las naciones.
De acuerdo a la información dada por los voceros de la Casa Blanca, ambos presidentes hablarán sobre: «el apoyo firme de Estados Unidos a la democracia brasileña y los «desafíos en común, como el cambio climático, la seguridad alimentaria, el desarrollo económico, el fortalecimiento de la paz y la seguridad, y la migración regional».
En el caso del presidente suramericano, sus esperanzas en este viaje están en fortalecer y reafirmar la colaboración estratégica con Estados Unidos, para que de esta forma se acelere la cooperación de los problemas que afectan a ambos países como el medioambiente y la defensa de la democracia.
Esta será una reunión de mucha tensión ya que el ex presidente y antecesor de Lula, Jair Bolsonaro se encuentra residenciado en Estados Unidos desde finales de diciembre pasado aunque la posible residencia del ex mandatario no aparece entre los temas a tratar.
Lula tiene como prioridad absoluta, el medio ambiente por lo que enfatizará la preservación de la Amazonía y el impacto del cambio climático.
Esto fue uno de los mayores problemas durante la administración de Bolsonaro ya que bajo su mandato se produjo una deforestación de casi el 60% de la mayor selva tropical del planeta por lo que los desastres climáticos se reflejan ahora.
Como siguiente parada de su gira oficial, Lula pasará por China, el primer socio comercial de Brasil. Una nueva alianza estratégica podría estar a la vuelta de la esquina.