La leyenda de la NBA, Michael Jordan, vendió su participación en el equipo Charlotte Hornets y con esta transacción consolidó su patrimonio neto en unos 3.500 millones de dólares, de acuerdo con el Índice de Multimillonarios de Bloomberg.
El origen de su fortuna proviene principalmente del acuerdo de licencia con Nike en 1984, cuando firmó por 2,5 millones de dólares. Poco después se presentó el primer modelo Air Jordan. El año pasado, Jordan Brand registró 5.100 millones de dólares en ingresos, lo que representa casi 11% de las ventas totales de Nike, según documentos de la empresa.
El cálculo del índice Bloomberg estima que ganó una regalía de 5% sobre las ventas de Air Jordan, así como ingresos por acuerdos de patrocinio y su salario en la NBA.
Simeon Siegel, analista de BMO Capital Markets, dijo que la marca Jordan lo ha “trascendido” como jugador. Muchos de sus clientes son demasiado jóvenes para haberlo visto jugar básquet profesional.
El deportista del Salón de la Fama fue el primer propietario afroamericano de la liga estadounidense (en el año 2010) al adquirir una parte mayoritaria de los Hornets, entonces denominados Bobcats.
Ahora, Jordan vendió su participación en los Hornets a un grupo liderado por Gabe Plotkin, fundador de Melvin Capital Management y Rick Schnall, copresidente de la firma de capital privado Clayton, Dubilier & Rice. Como parte del acuerdo de US$3.000 millones, Jordan decidió retener una participación minoritaria no revelada, según el equipo. La estimación de Bloomberg supone que vendió una participación del 65% en el equipo y se quedó con menos del 5%.
En los últimos años, otros atletas han buscado sus propios acuerdos de marca a largo plazo con líneas de ropa deportiva con la esperanza de ser “como Mike”.