Los milagros existen.
Los niños tienen 13, 9 y 4 años, y un bebé de once meses desaparecidos en la selva de Caquetá, en la zona de frontera con el Guaviare, están con vida; viajaban junto a tres adultos que murieron en una aeronave que se estrelló hace 17 días.
Los niños son Lesly Jacobombaire Mucutuy, de 13 años; Soleiny Jacobombaire Mucutuy, de 9 años; Tien Noriel Ronoque Mucutuy, de 4 años, y Cristin Neriman Ranoque Mucutuy, de sólo 11 meses.
Los pequeños viajaban en la avioneta tipo C206 con Hernando Murcia Morales, Herman Mendoza y Magdalena Mucutuy Valencia, la madre de los menores. Todos los adultos perecieron en el hecho.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó la noticia a través de sus redes sociales. Según lo que dijo, los niños fueron encontrados a salvo gracias a la labor de las fuerzas armadas aunque se sabe que el aporte de los habitantes originarios del lugar, los aborígenes de la etnia huitoto, conocedores y habituados a los rigores de la selva, fueron de suma importancia.
Un perro de rescate, convertido hoy en héroe, llamado Ulises dió las pistas a las fuerzas especiales para rastrear y encontrar un refugio improvisado que los condujo hasta los niños.
El país siguió de cerca los hechos y hoy, se conmueve y resalta las duras condiciones en las cuales sobrevivieron niños de tan corta edad.
Todo valió la pena. Cada acción que se hizo desde hace 17 largos días. Incluso el perifoneo realizado desde helicópteros con la voz de la abuelita de los niños grabada en español y en lengua indígena.
«Lesly, le pido un favor, que yo soy su abuelita Fátima. Tiene que estar quieta porque el Ejército los están buscando para bien de ustedes. Hija, le agradezco que esté quieta. Si usted escucha micrófonos, hija, esté parada ahí para que ellos la encuentren y la traigan».
Se desconocen las razones del vuelo de la familia huitoto, aborígenes que viven con las condiciones hostiles de la Amazonía y conservan sus tradiciones como la caza, la pesca y la recolección de frutos silvestres.
