El Presidente de Argentina, Javier Milei, remarcó en su primera intervención en la Cumbre de Davos que Occidente está en peligro porque los países que deberían estar defendiendo el libre mercado y sectores del establishment y en cambio abren las puertas al socialismo.
“Hoy estoy acá para decirles que Occidente está en peligro porque aquellos que supuestamente deben defender los valores se encuentran cooptados por una visión del mundo que inexorablemente conduce al socialismo y a la pobreza”, dijo.
Agregó en ese mismo orden de ideas, que «el Estado no es la solución, es el problema mismo” y remarcó que entre los presidentes de la región y quienes impulsan el colectivismo «algunos lo hacen por deseos de ayudar al prójimo mientras que otros, por intentar pertenecer a una casta privilegiada”.
En su defensa al sistema destacó que el capitalismo de libre empresa es la única herramienta para terminar con el hambre, la pobreza y la indigencia. «La evidencia es incuestionable”, dijo.
También culpó al socialismo por impulsar una “pelea ridícula entre el hombre y la mujer”. “El libertarismo ya establece la igualdad entre los sexos, todos tenemos los mismos derechos otorgados por el creador. Lo único en que devino en esta agenda del feminismo radical es en mayor intervención del Estado para entorpecer el crecimiento económico, dar trabajo a burócratas», atacó el mandatario.
También negó el cambio climático.
Invitó a los demás países a sumarse a sus ideas. Dijo que Argentina se conoce “muy bien” el sistema “empobrecedor” porque ya se vivió. «El caso argentino es la demostración empírica de que si se adoptan medidas que entorpecen el libre funcionamiento de los mercados, la libre competencia, los sistemas de precios libres, el comercio, si se atenta contra la libertad privada, el único destino posible es la pobreza”, resumió como una advertencia.
No es un dato menor que la intervención del mandatario tuvo primero una cálida bienvenida del titular ejecutivo del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab, quien no solo lo felicitó por la elección sino también a su hermana, Karina Milei, actual secretaria general de la Presidencia, por “manejar” la campaña.
“Introdujiste un nuevo espíritu para la Argentina haciendo que esté más relacionada a la libertad de empresa. Estamos esperando escucharte”, le dijo Schwab al Presidente, que se acercó al estrado.
Antes de su discurso, el Presidente se reunió con el canciller británico, David Cameron.