El ministro de Trabajo de Canadá, Seamus O'Regan, manifestó estar harto y cansado de las quejas y preocupaciones de los canadienses sobre el aumento de los precios de la energía ante la llegada del frío invernal.
O'Regan afirma que el pueblo canadiense vive sumergido en drama y ansiedad: "Estoy harto y cansado de que la gente hable sobre el frío invierno y de lo que estamos haciendo (…) Y lo que más me molesta es la acumulación de drama y ansiedad entre la gente. Muchas cosas ya están sucediendo en el mundo en este momento", agregó restando importancia al tema.
En Canadá, las altas tasas de interés y la inflación podrían subir los costos de la calefacción en los hogares tras el frío invierno. La crisis global energética suscitada por el conflicto armado ocurrido entre Rusia y Ucrania pega de lleno en los bolsillos de los canadienses.
Por su parte, el Gobierno Federal no tiene jurisdicción para administrar los servicios de energía. Esta potestad la ostenta cada una de las provincias por lo que la regulación de los precios, las acciones que se puedan tomar o las subvenciones que se puedan aplicar quedan de parte de cada región.
Las tarifas que pagan los clientes por el gas natural se ajustan cada tres meses para reflejar los precios del mercado.
Otra incidencia al llegar la temporada invernal son los precios de la gasolina. Los canadienses manifiestan estar preocupados si llegara a plantearse un aumento en el servicio aunque el gobierno asegura que puede sostenerse igual que la tasa del mes de octubre, que se mantuvo al mismo nivel, sin aumento alguno.
O'Regan llamó a la calma y a confiar en las medidas económicas existentes: "Todos, cálmense (…) habrá más dinero en su cuenta bancaria que antes" aseguró.
El Banco Central de Canadá impulsa actualmente una campaña para combatir la inflación y para ello, elevó su tasa de interés de referencia bancaria hasta 3,75 %.