El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, aseguró este martes que su país tomará contramedidas tácticas y estratégicas para garantizar la seguridad de sus fronteras después de anunciarse el ingreso de Finlandia en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Peskov resaltó que esta decisión – prevista para hoy – podría representar una nueva escalada en las relaciones con la Alianza, ya que atenta contra la seguridad y los intereses de su país.
Ante la situación el alto funcionario ruso aseguró que Moscú actuará en función de cómo la OTAN «explota el territorio» finlandés y si despliega su infraestructura cerca de la frontera rusa.
«Precisamente, así lo percibimos nosotros», puntualizó Peskov.
Durante su encuentro con los medios, el funcionario ruso destacó que el caso de su vecino Finlandia difiere de las aspiraciones de Ucrania a ingresar en el bloque euroatlántico.
Peskov resaltó que el país de Europa del Norte nunca ha sido una nación anti-rusa y que durante décadas no ha habido litigios con las autoridades de Helsinki.
Suecia y Finlandia presentaron su candidatura de adhesión a la OTAN en mayo 2022, luego de comenzar el conflicto bélico Rusia-Ucrania, sin embargo, a pesar de que esta medida ya contaba con la aprobación de la mayoría de los integrantes de la Alianza, Turquía, se opuso a los trámites de ratificación.
Esto se debió a que estos países acogieron a cientos de militantes kurdos, que Ankara considera terroristas.
Escalada de tensión
A través de un comunicado, el Ministerio de Exteriores ruso calificó el ingreso de Finlandia a la OTAN como un sacrificio de Helsinki a su identidad y toda su independencia.
«La política de no alineación militar seguida por Helsinki hasta ahora ha servido durante mucho tiempo a los intereses nacionales de Finlandia, y ha sido uno de los factores importantes para asegurar la confianza en la región del mar Báltico y en el continente europeo en su conjunto», indicó el texto.
«La OTAN está llevando a cabo un conjunto de medidas para aumentar la preparación para el combate de las Fuerzas Armadas Conjuntas, intensificando el entrenamiento de combate y las actividades de reconocimiento cerca de las fronteras de Rusia y Bielorrusia», advirtió el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú.
A juicio del titular de defensa ruso, la Alianza está reforzando en la región valores “antirrusos”, lo que podría llevar a una escalada del conflicto.