Los reflectores están sobre el Hospital Universitario Galliera de Génova, Italia, donde un paciente de 70 años, internado para recibir tratamiento contra el cáncer, murió tras quedar en coma a causa de un error médico.
Según informes de varios medios, el hombre fue administrado con 80 dosis de insulina por error, en lugar de las 8 que realmente necesitaba, lo que desencadenó una serie de eventos devastadores.
El trágico desenlace se desencadenó cuando una confusión en la transcripción de la orden médica llevó a un exceso masivo en la dosificación de insulina.
Según detalla el medio Mirror, el número «80» reemplazó al «8» original en la orden, lo que condujo a la administración errónea del medicamento por parte del personal médico. A pesar de la evidente discrepancia en la dosis, las enfermeras encargadas de la administración no objetaron la orden y procedieron con la inyección, sin siquiera verificar los niveles de azúcar en sangre del paciente.
El resultado fue desolador: el hombre entró en un coma hipoglucémico del que no pudo recuperarse. Durante 16 días luchó por su vida en la unidad de cuidados intensivos, hasta que finalmente sucumbió.
Las autoridades judiciales están investigando el incidente, centrándose en la unidad de cuidados intensivos del hospital y en los profesionales médicos involucrados en el tratamiento del paciente.
Según las primeras indagaciones, el error se habría producido durante la transferencia de datos de la orden médica al sistema informático del hospital, lo que llevó a una interpretación errónea de la dosis necesaria.
El trágico suceso no solo deja un vacío en la familia del fallecido, sino que también plantea serias interrogantes sobre los protocolos de seguridad y vigilancia en la administración de medicamentos en el mencionado centro médico. La investigación continúa, con cuatro enfermeras y un médico bajo sospecha de negligencia médica, mientras que el hospital enfrenta la posibilidad de enfrentar cargos por homicidio involuntario.