Con el argumento de que debían esperar la “segunda venida de Jesucristo”, 77 personas estaban retenidas por un grupo de pastores en una iglesia en la ciudad de Owo, estado de Ondo, Nigeria.
Tras una denuncia de los vecinos, este fin de semana fueron rescatados por las autoridades policiales en la iglesia The Whole Bible Deliverance Church.
Las víctimas habrían sido persuadidas desde hace meses por los pastores a esperar en el templo el regreso de Jesucristo a la Tierra. De acuerdo a las investigaciones preliminares, el pastor Josiah Peter Asumosa convenció a los feligreses de que la abducción divina tendría lugar en abril; sin embargo, más tarde anunció que ocurriría en septiembre, informó Rusia Today.
Funmilayo Odunlami, portavoz de la Policía de Nigeria destacó, “en total eran 77 miembros, entre los que había 26 niños, ocho adolescentes y 43 adultos. Todos ellos fueron rescatados de la iglesia", dijo.
Odunlami señaló que al momento del rescate, los oficiales fueron agredidos por miembros de la congregación. Asimismo, señaló que continúan las investigaciones correspondientes.
El pastor principal de la iglesia, llamado David Anifowoshe, fue arrestado junto a varios de sus subordinados y se encuentra actualmente bajo custodia policial a la espera de que se complete la investigación y se presenten cargos contra él, señaló la Policía. La mayoría de los afectados se encuentran ya reunidos con sus familias.
El rescate fue posible gracias a los trabajos de inteligencia y al reporte de la madre de una de las víctimas, quien informó a los agentes que sospechaba que su hijo se encontraba retenido en la iglesia.
El padre de unos de los menores rescatados señaló que su hijo insistió en acampar en el templo después de que él decidiera dejar de asistir a sus servicios religiosos porque “sus enseñanzas bíblicas eran incorrectas”.
Además, una mujer dio la alarma sobre un posible secuestro que involucraba a la iglesia y otros residentes tenían quejas sobre el templo religioso, pero no sabían lo que estaba sucediendo adentro.
“Hacen servicios todo el día y la gente rara vez duerme cuando hacen sus vigilias”, dijo Tunde Valentino, un vecino que vive cerca. “Fue hasta el martes que vino una mujer diciendo que no les entregaban a sus dos hijos”, destacó.
Redacción LMN
