“Preocupan uso excesivo de fuerza y exhibición pública de detenidxs ‘(sic)’, contrarios a obligaciones DDHH” escribió la La Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) en Bolivia, a través de su cuenta de twitter, en relación al conflicto entre sectores de productores de hojas de coca, que exigen al gobierno boliviano parar el funcionamiento del llamado “mercado paralelo”.
La declaración se dio en el marco de la detención de 24 cocaleros aprehendidos este miércoles después de 10 días de protestas, para exigir a las autoridades que se desmantele el espacio abierto a pocas calles de la zona de Villa del Carmen en La Paz.
Los manifestantes, pertenecientes a la Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz (Adepcoca), alegan que el “mercado paralelo” está fuera de la norma, ya que por ley la venta de hoja de coca, para su consumo legal y tradicional, se puede hacer solo en los espacios de Villa Fátima en La Paz y el de Sacaba en Cochabamaba.
En su breve comunicado, la ONU insistió en que la “violencia en elconflicto cocalero exige acción constructiva de las autoridades, respetando derecho a protesta pacífica”, por lo que instan a que se establezca una mesa de diálogo para llegar a acuerdos entre las partes, propuesta que ya había hecho el gobierno nacional.
La misiva del organismo de Derechos Humanos, es el segundo llamado que se hace en relación al uso de la fuerza pública, ya que -a raíz de las detenciones- la Defensoría del Pueblo aseveró que la Policía boliviana “ha vulnerado el principio de presunción de inocencia” al “constatar” arrestos a “personas ajenas” al conflicto, como publicaron medios locales.
Sin embargo el Ministro del Interior, Eduardo del Castillo, aseguró que los 24 apresados tenían en su poder artefactos explosivos, retuvieron en contra de su voluntad a una oficial de la Policía de inteligencia, y portaban teléfonos con “números internacionales para operar criminalmente”.
Historia compleja
Las dos organizaciones en conflicto son Adepcoca, una institución privada que dirige Freddy Machicado, agrupa a varios grupos de productores de hoja de coca, y administra el Mercado Villa Fátima en La Paz, y Arnold Alanes, quien tiene el apoyo del gobierno y dirige el “mercado paralelo”.
El año pasado Alanes fue elegido por un grupo como dirigente de Adepcoca, asumiendo la gerencia del tradicional centro de distribución, avalado por el gobierno nacional, a través del ministro Del Castillo.
La nueva dirección generó malestar en el otro grupo, por lo que se realizaron protestas que terminaron en la destitución de Alanes, quien decidió abrir un mercado a pocas calles del que administró por un corto periodo de tiempo.
Los cocaleros en protesta insisten en que solo quieren que se cumplan las leyes, pero Alanes y el ministro han enfatizado que se trata de una acción con tintes políticos, con la intención de desestabilizar.
