Este domingo la oposición mexicana hizo oficial su candidatura para las elecciones presidenciales que se realizarán en junio de 2024 con Xóchitl Gálvez a la cabeza.
La candidata del frente de la oposición de México, prometió «unidad» y respeto ante las «mentiras» e «insultos» que atribuyó al actual presidente, Andrés Manuel López Obrador.
«Vamos a abrir las puertas del palacio nacional», prometió Gálvez, de 60 años, senadora y empresaria de origen indígena, al ser investida oficialmente para las elecciones de junio próximo.
La senadora mexicana fue proclamada como la candidata oficial de la oposición ante miles de personas que se congregaron en la emblemática avenida Paseo de la Reforma de la capital mexicana para presenciar el momento.
«Hace apenas unos meses la oposición estaba de caída, decían por todos lados que no había oposición y hoy hay oposición, aquí está la oposición, le dimos la vuelta al pesimismo. Juntos recuperaremos la esperanza y hoy estoy contenta, decidida y llena de esperanza. Acepto con orgullo», dijo la ahora candidata.
Campaña electoral
La senadora lanzó su campaña en junio tras ser expulsada de la sede de la presidencia cuando quería asistir a la conferencia de prensa diaria de López Obrador para responderle en directo.
«No vamos a recurrir a la ofensa, al insulto, a la descalificación. México necesita a una presidenta que respete a todas y todos», proclamó la abanderada del Frente Amplio, que agrupa a los tres principales partidos de la oposición, el derechista PAN, el centroizquierdista PRD y el PRI, hegemónico durante casi un siglo en México.
«No tengo formalmente un partido. (…) Soy políticamente daltónica. Sólo veo un color, el color de México», dijo la legisladora oriunda del estado de Hidalgo (centro).
Su principal rival debería ser otra mujer, la exalcaldesa de Ciudad de México Claudia Sheinbaum, favorita en las primarias del partido gobernante Morena, cuyo resultado se espera para el próximo miércoles. Gálvez volvió a machacar con las expresiones populares que le han dado fama: «Ni huevones, ni rateras ni pendejos», proclamó.