Los padres de una escuela en un pueblo de Francia, inscribieron a cuatro ovejas como alumnas del plantel, para evitar que cierren el centro de formación que no cumplía con la matrícula mínima según el ministerio de Educación.
En algunos colegios del país europeo, alcanzar un número determinado de alumnos cada año es crucial para evitar el cierre de clases o incluso de toda la escuela. Esta situación pone a las instituciones en una carrera contra el tiempo y la demografía, donde la prioridad puede cambiar de la calidad de la educación a simplemente tener suficientes estudiantes.
Solución creativa en Lorena
En el pintoresco pueblo de la región de Lorena, en Francia, los padres preocupados por no alcanzar el cupo mínimo de alumnos han encontrado una solución creativa: matricular ovejas como estudiantes.
Esta medida busca mantener abierta una de las cinco aulas del colegio que sirve a las localidades de Nitting, Voyer y Hermelange, resaltó La Vanguardia.
Matriculación de ovejas
El colegio ha inscrito a las cuatro ovejas, cuyos nombres son John Deere, Valériane Deschamps, Phil Tondus y Marguerite Duprès, todos elegidos por los padres.
Con estas inscripciones, el número total de estudiantes llega a 98, justo el mínimo requerido por el Ministerio de Educación francés para que la clase siga operativa.
Padres llevan la protesta al extremo
“Si cuentan a los niños como si fuesen ovejas, decidimos ir hasta el extremo del absurdo”, explicó Élodie, una madre implicada en esta medida. Los alumnos han recibido a sus nuevas compañeras ovinas con gran entusiasmo en una ceremonia especial, aunque las ovejas seguirán llevando una vida normal de animales.
Apoyo del alcalde y continuidad de la protesta
Los padres también han llevado más ovejas al patio del colegio para seguir protestando contra las medidas del gobierno francés. El alcalde de la localidad ha respaldado esta inusual medida, recordando que en 2021 la misma clase continuó con tan solo 90 estudiantes.
Hecho similar en el pasado
No es la primera vez que esto ocurre, ya en el año 2019 un granjero «inscribió» 15 ovejas en un colegio en un pueblo francés de los Alpes, donde también pretendían cerrar la escuela por no cumplir con la matrícula mínima, reportó en esa oportunidad el medio Milenio.