El presidente de Azerbaiyán y presidente del grupo de Países No alineado (Mnoal), Ilham Aliyev, insistió en la necesidad de reformar el Consejo de Seguridad de la ONU y reclamó la ampliación del número de miembros -para hacerlo más representativo- con un asiento permanente para los países que ocupen la presidencia rotativa de este grupo de 120 países.
“El Consejo de Seguridad de la ONU es una reminiscencia del pasado que no refleja la realidad del presente”, dijo.
Tanto Aliyev como otros dignatarios participantes criticaron los enfoques selectivos y dobles raseros aplicados en muchos aspectos de la política internacional y reiteraron la importancia de la solidaridad, la unidad y el respeto como factores claves del momento que hoy vive la humanidad, reseñó Prensa Latina.
En la cita de Bakú, los asistentes advirtieron que el mundo atraviesa un proceso de transformación en medio de “la mayor confrontación desde el final de la guerra fría” y con repercusión en todo el mundo.
El presidente anfitrión alertó contra una creciente tendencia hacia el colonialismo y recordó que el Mnoal se formó como parte del proceso de descolonización.
También alertó sobre la violación de los principios de soberanía y no injerencia y los riesgos que se ciernen sobre el multilateralismo.
Crisis post Covid
El llamado Grupo de Contacto identificó los más importantes problemas de la actualidad internacional que afectan la preparación del mundo para la etapa post pandémica del Covid-19.
También se discutieron los efectos negativos del cambio climático y su impacto en los pequeños Estados insulares y la necesidad de financiación para la adaptación a ese fenómeno.
La cumbre concluyó con un informe que ratifica la decisión del movimiento de extender hasta finales de 2023 (debió terminar en 2022) el mandato de Azerbaiyán al frente de los No Alineados, cuando pasará a manos de Uganda.