La capital del gigante asiático se encuentra actualmente bajo la segunda alerta roja de este verano, que refleja la gravedad del clima extremo que afecta a la región. Este sistema de tres niveles codificado por colores, se activó por temperaturas de más de 40 grados.
La estación meteorológica de Nanjiao, ubicada en el sur de Pekín, ha establecido un nuevo récord al registrar una temperatura máxima de 40,9 grados. Durante el mes de junio y hasta el 5 de julio, esta estación ha experimentado 18 días con temperaturas superiores a los 35 grados y 4 días con temperaturas superiores a los 40 grados.
Ante estas condiciones extremas, las autoridades de Pekín han emitido recomendaciones para hacer frente al calor intenso. Entre estas medidas se encuentra la ingesta mínima diaria de dos a tres litros de agua, así como buscar lugares frescos para resguardarse.
Se prevé que la ciudad continúe experimentando altas temperaturas hasta el viernes, lo cual ha llevado al departamento meteorológico a aconsejar a los residentes reducir las actividades al aire libre y tomar precauciones necesarias para prevenir golpes de calor y quemaduras solares al salir.
Además de las altas temperaturas, algunas regiones del país se enfrentan a inundaciones debido a las intensas lluvias. Durante este verano, estas precipitaciones torrenciales han ocasionado decenas de fallecidos y más de un millón de damnificados en áreas como Chongqing, Hunan, Sichuan, Jiangxi y Mongolia Interior.
Con información de DW