El secretario personal del difunto pontífice Benedicto XVI, Joseph Aloisius Ratzinger, -desde 2003 hasta su muerte el pasado 31 de diciembre-, Georg Gänswein, publicó sus memorias y allí reveló que existen dos corrientes en el Vaticano: los seguidores del ídolo del sector más conservador, Benedicto, y quienes apoyan a su sucesor, Francisco, quien es señalado por sus detractores de “comunista”.
El libro, titulado 'Nient'altro che la verità' (Nada más que la verdad), de la editorial Piemme,tiene 336 páginas y se concentra en la última década, y la inusual convivencia de los papas a partir de que Benedicto XVI se retiró con su histórica renuncia en 2013.
Asegura que el pontífice y teólogo alemán consideró un error el documento "Traditionis Custodes", con el que Francisco puso coto a las misas en latín, propias de tiempos previos al Concilio Vaticano II, soliviantando a los miembros más tradicionalistas de la Iglesia.
Gänswein reprochó en su libro al papa Francisco su orden para sacarlo de prefecto de la Casa Pontificia -uno de los cargos más importantes de la Curia-, para cuidar de Ratzinger en su retiro en el monasterio vaticano de Mater Ecclesiae.
Hace unas horas el papa Francisco y los creyentes católicos celebraron el Ángelus, desde la ventana del Palacio Apostólico. Allí dijo que "el chismorreo es un arma letal que mata el amor, la sociedad y la hermandad". Este mensaje fue interpretado como una supuesta reacción al libro del monseñor.
De hecho, el líder de la iglesia católica fijó una reunión con Gänswein de la que no se ha sabido el contenido, pero algunas fuentes apuntan a un decepcionado pontífice que ha pedido al histórico secretario de Benedicto XVI, discreción en los próximos días.
Tras la muerte de Joseph Ratzinger, y ahora con la publicación de este polémico libro, es muy poco probable que el padre Georg regrese a su cargo de prefecto de la Casa Pontifica, una especie de jefe de protocolo.
La opción podría ser asignarle una nunciatura, que salga del Vaticano para dar clases en una universidad católica en el extranjero, o el regreso a su Alemania natal.
Por otro lado, un cura de la diócesis de Bérgamo (norte), Alberto Varinelli, pidió públicamente en una carta a Gänswein que "bloquee inmediatamente" la publicación del libro, ya que "como bien sabe, ese texto es muy esperado por los sectores hostiles al papa reinante y, si habrá ataques a Francisco, hará mucho daño a la unidad de la Iglesia".
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