Por décima tercera ocasión, el Salvador extendió el régimen de excepción por 30 días más.
La medida, que ya cumplió un año, fue aprobada con los votos de 66 miembros del partido oficialista Nuevas Ideas (NI) y formaciones aliadas. El debate parlamentario se realizó luego que el Ejecutivo de Bukele, a través del Gabinete de Seguridad, solicitara la ampliación del régimen.
Hasta ahora su implementación ha sido cuestionada por sectores políticos del país, pero el gobierno del presidente Nayib Bukele la ha denominado como «guerra contra las pandillas».
«El régimen de excepción es legal y constitucional», dijo el diputado Guillermo Gallegos, de la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), durante la sesión plenaria.
El titular del Ministerio de Seguridad, Gustavo Villatoro, dijo tras la presentación ante el Congreso que el régimen de excepción «es la ruta a seguir para transformar este país».
El funcionario destacó que, desde que se implementó el régimen se registra un promedio de 0,6 homicidios cada día.
Además dijo que 65% de los 496 asesinatos cometidos en el 2022 fueron perpetrados en los primeros tres meses del año, antes de la implementación de la medida».
Según el reporte emitido hasta ahora, hay más de 67.000 personas detenidas, acusados de pandilleros.
El país centroamericano registró en 2015 el año más violento de su historia reciente y en 2016 comenzó a disminuir la cifra de asesinatos, tendencia que se acentuó en el Gobierno de Bukele.