La NASA encontró un grupo de seis galaxias que parecen ser demasiado grandes y los expertos aseguran que no deberían existir; la realidad está en las imágenes captadas por el Telescopio espacial James Webb.
Según los investigadores, las galaxias se formaron en los primeros 700 millones de años del universo y parecen ser hasta 100 veces más masivas de lo que predicen las teorías cosmológicas estándar, e incluso aseguran que son tan masivas como la propia vía láctea.
El astrónomo e investigador, Ivo Labbé, representante de la Universidad Tecnológica de Swinburne en Melbourne, detalla que al sumar las estrellas de esas galaxias, se superaría la cantidad total de masa disponible en el universo.
Ante el lente del telescopio espacial James Webb, las galaxias se perciben como estrellas rojas, muy mínimas pero al estudiarlas con detenimiento y detalle, resultan ser sumamente maduras.
El telescopio contiene un nivel de precisión nunca antes visto, está equipado con instrumentos de detección de infrarrojos capaces de detectar la luz emitida por las estrellas y galaxias más antiguas.
Asimismo, permite a los astrónomos ver hacia atrás en el tiempo aproximadamente 13 mil 500 millones de años, cerca del comienzo del universo tal como se conoce.
Este hallazgo pone en tela de juicio la comprensión de los científicos sobre cómo se formaron las primeras galaxias ya que, explicar la existencia de galaxias tan masivas se requeriría revisar algunas reglas básicas de cosmología o la comprensión de cómo se sembraron las primeras galaxias a partir de pequeñas nubes de estrellas.
El telescopio espacial James Webb es un observatorio espacial desarrollado a través de la colaboración de 14 países, construido y operado conjuntamente por la Agencia Espacial Europea, la Agencia Espacial Canadiense y la NASA para sustituir los telescopios Hubble y Spitzer.
El James Webb ofrece una resolución y sensibilidad sin precedentes y permite una amplia gama de investigaciones en los campos de la astronomía y la cosmología.
La NASA continúa comprometida en estudiar los objetos más distantes del universo, como la formación de las primeras galaxias, un tipo de objetivo están fuera del alcance de los instrumentos terrestres y espaciales actuales.