Una feroz tormenta invernal agolpeó al noreste de Estados Unidos con fuertes vientos y dejó a miles de personas sin electricidad en medio de una ola de clima inhóspito en gran parte del país.
«La tormenta, que empezó el martes en la noche y se desplazaba el miércoles, inundó carreteras y derribó árboles y cables de electricidad. Soplaban vientos de entre 72 y 88 kilómetros por hora (entre 45 y 55 millas por hora) y se prevé más clima invernal todo el miércoles», reseñó EFE.
La tormenta ocurre luego de un día de tornados y accidentes fatales en el sur y densas nevadas en el centro-occidente y noroeste del país.
En Nueva Jersey, donde el gobernador Phil Murphy declaró el estado de emergencia en previsión de la tormenta, muchas calles y carreteras estaban inundadas y los ríos crecidos luego que algunas zonas recibieron hasta 7,6 centímetros de lluvia el martes en la noche. La tormenta obligó a suspender algunos trenes en la ciudad de Nueva York e inundó una carretera en el Bronx; miles de trabajadores quedaron varados el miércoles en la mañana.
“Esto va de mal en peor”, comentó Lou DeFazio, de 65 años y residente de Manville en Nueva Jersey. Añadió que el río Millstone, cerca de donde él vive, rebasará su cauce el miércoles.
En Maine, la gobernadora Janet Mills postergó hasta el mediodía la apertura de todas las dependencias públicas debido a la tormenta, que empezó como nieve y luego se convirtió en lluvia en partes de Nueva Inglaterra. Había densas nevadas en partes de Vermont, Nueva Hampshire y Maine el miércoles en la mañana.
Partes de la costa de Long Island estaban inundadas el miércoles en la mañana. En el pueblo de Freeport, en el condado Nassau, los autos se abrían paso por calles anegadas. Más al este, cerca de los Hamptons, el Servicio Meteorológico Nacional reportó graves inundaciones en Shinnecock Bay. Varias escuelas en Long Island suspendieron o postergaron clases debido a la tormenta.
El clima invernal surge justo cuando el noreste de Estados Unidos apenas se recupera de una tormenta previa que dejó más de 30 centímetros (un pie) de nieve en algunas zonas.
En Danbury, Connecticut, las autoridades informaron que el agua resultante de la nieve derretida había abrumado los desagües de la ciudad e inundó una docena de intersecciones. Por lo menos un conductor fue rescatado dentro su vehículo.
Los fuertes vientos alcanzaron los 153 kilómetros por hora (95 millas) en Isle au Haut, en Maine, y 134 km/h (83 mph) en Rye, en Nueva Hampshire, dijo Jon Palmer del servicio meteorológico en Gray, Maine.
con información de AP y EFE