Una trágica situación ocurrió en Minnesota, donde Covil Allen, un niño de 3 años, perdió la vida tras ser atacado por dos perros. A pesar de esta dolorosa pérdida, el corazón de Covil ha dado esperanza al salvar la vida de una niña de 1 año.
El incidente tuvo lugar el pasado viernes 19 de julio, cuando Covil y su madre, Tasha, se encontraban en el patio trasero de una residencia en Brooklyn Park junto a Christian, el hermano mayor de Covil, para adoptar un cachorro.
Mientras Christian y Tasha jugaban con el cachorro, de repente escucharon los gritos de Covil. Los bulldogs americanos, padres del cachorro, habían atacado al pequeño. Tasha corrió a rescatarlo y también fue atacada por los perros.
Los agentes de la policía de Brooklyn Park llegaron al lugar, controlando la situación rápidamente. Ambos perros fueron disparados por los oficiales; uno murió y el otro resultó herido. Lamentablemente, Covil no sobrevivió a ser atacado por dos perros, mientras que su madre sufrió heridas graves que requirieron tres cirugías y múltiples injertos de piel.
Tras la tragedia, la familia de Covil tomó la decisión de donar sus órganos, colaborando con Life Source, una organización de donación de órganos. Según personas cercanas a la familia, esta decisión se tomó para honrar la memoria de Covil y evitar que otras familias sufran un dolor similar.
Lindsey Hemmerich, una amiga cercana de la familia, expresó: «Esto es lo más hermoso que ha salido de esta tragedia, y no podríamos estar más felices de que su corazón haya podido salvar a alguien más».
Finalmente, a través de una página de GoFundMe, se confirmó que el corazón de Covil fue donado con éxito a una niña de 1 año.