El Consejo de Estado de Colombia rechazó una demanda para prohibir la extracción de gas y petróleo a través de la técnica conocida como “fracking” o fracturación hidráulica.
Según el comunicado oficial del tribunal no se demostraron pruebas suficientes para que la demanda prosperara.
La votación de los miembros del Consejo de Estado (el tribunal supremo de la jurisdicción de lo contencioso administrativo y cuerpo supremo consultivo del gobierno nacional) fue cinco votos a favor y tres votos salvados.
No es un dato menor que la discusión llevaba alrededor de tres años en el alto tribunal el cual finalmente, dejó en firme un decreto y una resolución del gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos.
En aquella ocasión empezó la explotación de hidrocarburos en los llamados yacimientos no convencionales.
También el gobierno del mandatario saliente, Iván Duque, implementó esta práctica alegando su importancia para la seguridad energética.
En cambio, el presidente electo, Gustavo Petro, ha sido un constante crítico de esta forma de extracción y una de las banderas de su campaña fue la transformación de la matriz de producción de energéticos, incluyendo la prohibición de prácticas contaminantes como el fracking.
De hecho, rechazó la decisión del tribunal y aseguró en sus redes sociales que "no habrá fracking".
Organizaciones defensoras del medioambiente, personalidades de la política y otros activistas colombianos también rechazaron la decisión.
La Alianza Colombia libre de fracking dijo recibir con preocupación la decisión del Consejo de Estado pues desconoce el principio de precaución en materia ambiental y el riesgo de daño grave e irreversible que representa esta técnica experimental.
Afirman que "esta decisión resulta peligrosa en el contexto de la crisis climática y abiertamente incoherente frente a los compromisos internacionales adquiridos por Colombia".
