Este martes el Tribunal de Estrasburgo emitió un fallo histórico a favor de una de las tres demandas planteadas por la acción insuficiente de los Estados para limitar el cambio climático.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condenó a Suiza por violar los artículos 2 y 8 del Convenio Europeo de Derechos Humanos con respecto al «derecho al respeto a la vida privada y familiar».
La asociación Klimaseniorinnen, que traduce «Mayores por el clima», conformada por 2.500 mujeres con una media de 73 años, denunciaron que las deficiencias de las autoridades suizas en materia de protección del clima perjudican gravemente su estado de salud.
De acuerdo al tribunal, en el país helvético han habido carencias para cuantificar, mediante la fijación de un precio al carbono o de otra manera, la limitación de sus emisiones de efecto invernadero.
Además sostienen que Suiza no respetó los objetivos que se había planteado para mitigar esas emisiones.
Sin embargo, esta victoria es agridulce, ya que los jueces dejaron sin efecto la demanda que habían planteado seis jóvenes portugueses contra su país, y también contra otros 31 países europeos por las políticas insuficientes para mitigar el cambio climático.
Los jueces desestimaron los argumentos sin detallar a fondo las razones, porque no habían agotado las vías internas del país al que denuncian antes de llevar un caso a Estrasburgo.
El TEDH también señaló que no se puede dictar una política determinada a los Estados sobre lo que tendrían que hacer por los efectos que eso tendrá para personas fuera de su territorio o fuera de su autoridad y su control.
Esta sentencia marca un hito significativo en el movimiento de justicia climática no solo para Suiza sino también para otros países europeos que afrontan desafíos similares.
«En los últimos años han aumentado los litigios por la inacción climática, y tras este precedente, el activismo jurídico por el clima será imparable» señaló Irene Rubiera, abogada de Ecologistas en Acción.
