El Ministerio de Exteriores turco convocó al embajador danés, Danny Annan, para protestar contra la quema de un ejemplar del Corán y una bandera turca en Dinamarca, hechos ocurridos este viernes 14 de abril.
A través de un comunicado oficial Turquía catalogó de inaceptable estos ataques y aseguró que no son más que manifestaciones cargadas de falta de respeto y disfrazadas de libertad de expresión.
Cabe destacar, que el 24 y el 31 de marzo pasado tuvieron lugar incidentes muy similares, organizados por un grupo nacionalista, quienes transmitieron vía facebook todo el acto.
El comunicado emitido por la cancillería cita: «Condenamos el vil ataque contra nuestro libro sagrado, el Corán, y nuestra gloriosa bandera hoy (viernes) que tuvo lugar una vez más en Dinamarca (…). Nuestra postura sobre este tema fue puesta en conocimiento del embajador danés en Ankara, quien fue convocado al ministerio».
Por su parte, Ankara condenó los actos como crímenes de odio y de islamofobia, racismo y discriminación en Europa.
La actitud de Dinamarca provocó la reacción de todos los musulmanes del mundo y demostró que no se tiene en cuenta el malestar del colectivo.
Ahora, se desconocen las medidas que tomará el gobierno turco pero se espera un nuevo informe de cancillería con detalles y acuerdos.
En episodios anteriores se han visto manifestaciones en las calles y protestas de carácter masivo tras la quema del libro sagrado.