¿La solución para acabar con la adicción de los jóvenes a los smartphones? Podría ser un contrato. Al menos esa fue la opción que consiguió un juez de Málaga, que ante la insistencia de su hija de tener un móvil a los 12 años ha redactado un contrato que establece cómo y cuándo puede usarlo si quiere tenerlo.
A través de su cuenta en twitter @judgeTheZipper, publicó el documento que debe firmar su hija y además pidió opinión a sus más de 83 mil seguidores. “A ver qué os parece y si creéis que se nos olvida algo”, dijo.
El documento consta de 10 cláusulas, estas son algunas:
- "El teléfono no es tuyo, es de papá y mamá, que son quienes lo compran y pagan internet". Esto implica que en cualquier momento se lo pueden pedir para "ver lo que hay en cualquier aplicación", y tienen que "conocer las contraseñas".
- Solo se pueden descargar aplicaciones de redes sociales con autorización y según condiciones fijadas.
- El teléfono se usa solo a determinadas horas, a la hora de dormir no debe estar dentro de la habitación, no se lleva al colegio y no se usa mientras se desayuna, almuerza o cena.
- Finalmente, no se pueden enviar mensajes ofensivos. "Siempre, y en todo caso, si recibes alguno de estos mensajes debes decírnoslo", dijo el juez.
Para la chica, la consecuencia directa del incumplimiento de una de estas condiciones es la retirada del equipo y la suspensión de su uso.
La medida, como suele pasar, tiene sus detractores y en redes sociales varios usuarios lo dejaron claro. Entre ellos, Rafa Sanz quien escribió, “si luego tu hija tiene un novio que le pide que le deje mirar su móvil y que le diga las contraseñas, a ver con qué cara le explicas que eso está mal".