El pasado sábado 24 de diciembre, la policía de Brasilia detuvo a George Washington de Oliveira Sousa, un empresario simpatizante de Jair Bolsonaro de 54 años que intentó estallar un camión cisterna en el aeropuerto internacional de Brasilia, a pocos días de la toma de posesión del presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva.
De acuerdo a declaraciones de Sousa hechas desde la cárcel, la razón por la que había ido a Brasilia a colocar la nota, fue el llamado del ex presidente Jair Bolsonaro para armarse.
"Mi viaje a Brasilia fue para unirme a las protestas frente al cuartel general del ejército, y esperar a que las fuerzas armadas me autorizaran a tomar las armas y destruir el comunismo" afirmó el acusado en una declaración.
Washington de Oliveira, llegó a Brasilia para unirse a las protestas para pedir un golpe de estado contra el presidente electo.
El acusado se ha gastado un aproximado de 30.800 dólares armando su arsenal, después de declaraciones del ultraderechista y presidente saliente.
"Lo que me motivó a comprar las armas fueron las palabras del presidente Bolsonaro, que siempre enfatizó en la importancia de que los civiles estén armados diciendo: 'Una población armada nunca será esclavizada'”
Brasil se encuentra bajo mucha tensión por la próxima toma de posesión del presidente electo, prevista para el 1 de enero de 2023.
Reforzar la seguridad
Flavio Dino, el ministro de justicia entrante, afirmó que el día previo a la toma de posesión deberán reforzar la seguridad tanto del futuro presidente de Brasil, como en las instalaciones del aeropuerto, ya que se espera la llegada de diversos jefes de estado y altos representantes de gobierno.
Oliveira explicó a las autoridades que construyó la bomba para “iniciar el caos y así evitar que un gobierno comunista regrese al país”. El comisario general de la Policía Civil, Robson Cândido, advirtió a las personas que esta acción no es un hecho solitario y que no debe ser tomado a la ligera.
Hasta los momentos, Oliveira Sousa es la única persona detenida por el atentado, sin embargo, se espera que aparezcan más personas, ya que oficiales de la policía encontraron en la casa del sospechoso un arsenal completo que incluía dos escopetas, un fusil, dos revólveres, tres pistolas, cientos de municiones, cinco mezclas para explosivos, un detonador remoto y uniformes de camuflaje.
De acuerdo a un informe dado por Robson, un hombre consiguió una caja sospechosa junto a su vehículo, por lo que tomó la previsión de llamar a las autoridades, quienes descubrieron que se trataba de una bomba de fabricación casera, la cual sería colocada en un poste eléctrico para interrumpir toda la electricidad de la ciudad, solo que Oliveira cambió de idea al último momento y la colocó junto a un camión para provocar la explosión.
A pesar de ser apagado por el escuadrón antibombas, se registraron dos pequeñas explosiones sin daños de gravedad.
