El embajador chino en Berna, Wang Shihting, aseguró este sábado que Suiza debería evitar seguir a la Unión Europea (UE) en imponer sanciones a China, luego de la publicación de un informe de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que detalla sobre los abusos de los derechos humanos contra la minoría uigur en el oeste del país asiático.
Tras este informe, la UE impuso sus primeras sanciones contra Beijing desde un embargo de armas en 1989 tras la represión de la plaza de Tiananmen, sin embargo, Suiza aun no se pronuncia sobre una posible sanción económica contra el gigante asiático.
En declaraciones a la prensa, el diplomático chino destacó que "cualquiera que realmente se preocupe por las relaciones amistosas entre los dos países y que haga una política responsable no aceptará las sanciones".
El alto funcionario enfatizó que si “Suiza adopta las sanciones y la situación se desarrolla en una dirección descontrolada, las relaciones chino-suizas sufrirán".
Mientras tanto, autoridades suizas que prefieren mantenerse en el anonimato, afirmaron que, a pesar de ser un país neutral en conflictos externos, pueden adoptar cualquier medida que la UE considere si llegase a darse un posible escenario en que China invada Taiwán.
Con base en lo anterior, el Gobierno suizo anunció algunos cambios puntuales en materia política con China, pero destacando la importancia de los lazos bilaterales entre ambas naciones.
A pesar de esto, Berna ha sido más abiertamente crítico sobre la detención arbitraria y discriminatoria por parte de China de uigures y otros musulmanes en su región de Xinjiang.
En 1950, Suiza fue uno de los primeros países occidentales en reconocer a la China comunista y desde el 2010, el gigante asiático es su mayor socio comercial y el tercero a nivel mundial después de la UE y Estados Unidos.
En 2014 entró en vigencia un acuerdo de libre comercio y este año se consolidó una plataforma conjunta para la cotización de acciones y el comercio.
