El presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, aseguró que Ucrania propuso a su país un pacto de no agresión pero que de manera paralela prepara a "extremistas" bielorrusos en su territorio.
" Nos proponen firmar un pacto de no agresión, que no nos enfrentemos a Ucrania y que nuestras tropas no avancen y por otro lado preparan una mezcla explosiva al armar y entrenar a opositores bielorrusos en su territorio”, afirmó durante una reunión con su tren ejecutivo.
El mandatario enfatizó que nunca permitirá que se repitan las sacudidas de 2020, en referencia a las masivas protestas durante las pasadas elecciones presidenciales, calificadas como fraudulentas por la oposición y Occidente.
No es un dato menor que además de Ucrania, Polonia y Lituania también entrenan grupos opositores bielorrusos.
Lukashenko señaló que ante las amenazas externas “la reacción a la oposición extremista interna será firme. Y que no se ofendan, porque les avisamos”.
Regreso de los exiliados
El fiscal general de Bielorrusia, Andréi Shved, informó a Lukashenko que se creará una comisión institucional para permitir el retorno a los opositores que quieren regresar, tras marcharse del país.
Señaló que se estudiarán de modo individual cada caso y consideró posibles indultos para quienes expresen arrepentimiento.
"Muchos en realidad no están acusados de nada, ni son sospechosos de nada. Son personas a las que les lavaron el cerebro o se inventaron cosas ellos mismos. Nosotros no tenemos nada contra ustedes, pueden regresar tranquilos al país", aseguró el fiscal.