La organización Médicos Sin Fronteras (MSF), informó este jueves, que más de 18.000 migrantes se encuentran “a la deriva” en la frontera entre México y Estados Unidos por las “políticas migratorias inhumanas” de ambos países.
“El 2022 cerró con una ola gélida que mantuvo temperaturas bajo cero durante todo ese fin de semana, agravando las ya difíciles condiciones existentes para las cerca de 18.000 personas que actualmente esperan en la frontera norte”, manifestó la organización en una comunicación.
En el texto, MSF criticó la postura del presidente estadounidense Joe Biden, de incumplir su promesa de eliminar la restricción fronteriza conocida como Título 42.
Implementada bajo el gobierno del expresidente Donald Trump, el 20 de marzo de 2020, el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), emitieron en conjunto una orden de salud pública con el objetivo de detener la propagación del coronavirus.
Esta orden permite a los funcionarios federales expulsar inmediatamente a los a los migrantes en las fronteras terrestres de EEUU.
Mientras que el CBP argumentó en esta orden, la prohibición de entrada de ciertas personas que "potencialmente representan un riesgo para la salud", ya sea por medidas previamente anunciadas o por haber ingresado ilegalmente al país, con el fin de eludir los centros de campaña de detección del coronavirus.
A pesar de que la emergencia sanitaria culminó en el país norteamericano, esta medida se ha extendido varias veces con el pasar de los meses.
MSF destaca que, hasta septiembre de 2022, de los más de 2,2 millones de migrantes aprehendidos, la mitad de ellos, “fueron rápidamente expulsados hacia peligrosas ciudades mexicanas mediante el Título 42”.
“La aplicación de esta política ha causado una crisis humanitaria en ciudades del norte de México como Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredo y Piedras Negras. En esos lugares, los migrantes se enfrentan a condiciones climáticas extremas”, subraya la organización médica y humanitaria.
En este sentido, MSF asegura que del lado mexicano se ha evidenciado “el sufrimiento causado por estas políticas inhumanas y la persecución de las autoridades”, contra este grupo de personas que buscan una mejor calidad de vida.
Ante esta situación, exigió una respuesta coordinada y efectiva que involucre a organizaciones e instituciones de ambos países, para atender de manera exitosa esta emergencia migratoria.
El pronunciamiento ocurre después que se celebrara esta semana en Ciudad de México, la Cumbre de Líderes de América del Norte, en la cual el presidente Biden agradeció a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, por recibir a migrantes deportados de Estados Unidos.