La Policía Federal de Brasil informó este sábado la detención de Anderson Torres, quien fue ministro de Justicia de la administración de Jair Bolsonaro. La operación se realizó en el marco de las investigaciones por el intento de golpe de Estado contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, el pasado domingo.
Torres regresó al país sudamericano a pedido del ministro Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal (STF), y fue arrestado en el aeropuerto internacional de Brasilia tras desembarcar desde Miami, Estados Unidos.
Un video publicado en las redes sociales muestra a Torres en el aeropuerto de Miami siendo escoltado a la puerta de embarque por policías.
El ex alto funcionario, se desempeñaba como jefe de seguridad cuando ocurrió la insurrección por parte de los “bolsonaristas” en los edificios gubernamentales de Brasil.
Sin embargo, en una publicación de su cuenta Twitter, Torres negó cualquier participación en los ataques contra los edificios del gobierno después de que fue destituido de su cargo. “Lamento profundamente esas hipótesis absurdas de cualquier tipo de colusión de mi parte”, subrayó.
Bajo esta premisa, el STF acusó a torres y al excomandante de la policía militar del Distrito Federal, Fabio Vieira, de intento de golpe de Estado, actos terroristas, daño a la propiedad pública, asociación para delinquir y abolición violenta del estado de derecho.
Luego de su detención, Torres se reunió con su equipo de abogados en la Superintendencia de la Policía Federal en Brasilia antes de dar testimonio a la Fiscalía.
En la misma línea, la Fiscalía solicitó este viernes que se investigue al expresidente Bolsonaro por su posible participación como autor intelectual de los asaltos a las sedes de la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema a manos de sus seguidores.
También la Procuraduría General de la República solicitó incluir a la lista de investigados al ex jefe de Estado por haber incitado los actos vandálicos y anti democráticos para impulsar un posible golpe de estado.
Esta solicitud se desprende del mensaje que compartió Bolsonaro en la red social Facebook, en la que afirmaba que en las recientes elecciones presidenciales Lula no fue elegido por el pueblo, sino por los jueces del Supremo y del Tribunal Superior Electoral.
Horas después, el líder ultraderechista borró la publicación. En este punto, la Fiscalía envió una comunicación oficial a Meta, empresa matriz de Facebook, para que esa publicación no se pierda y quede los metadatos guardados para la investigación.
