El cine venezolano ha remontado la cuesta y al cierre del año 2022 las cifras que ofrece el Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC), dan cuenta del ascenso de este sector.
El estreno de 27 películas con sello venezolano, junto a 93 nuevos proyectos que podrán realizarse en el 2023 con el apoyo financiero de esta institución, son apenas dos de los indicadores de gestión que confirman la gradual recuperación de la industria cinematográfica en el país.
Desde el año 2021 se inició con un período de transición, el cual ha permitido el resurgir de una amplia variedad de propuestas cinematográficas, que se reflejan en obras conceptualizadas y narradas desde la visión particular del venezolano.
“Que Buena Broma Bromelia” (2022) de Efterpi Charalambidis, inició en enero el calendario de los 27 estrenos cinematográficos que llegaron a las salas de cine comercial, una cifra alentadora que deja en el pasado la sequía de los últimos años.
El gremio audiovisual celebró los nueve premios internacionales alcanzados por esta película que sigue dejando huellas a nivel internacional.
"El Exorcismo de Dios" de Alejandro Hidalgo, "Free Color" de Alberto Arvelo, "Un Destello Interior" de Luis y Andrés Rodríguez, "Azotes en llamas" y "La Toma" de Jackson Gutiérrez, "El año de la Persistencia" de Sergio Monsalve, "Tres son multitud, cuatro son un desastre" de Edgar Rocca, y "Un cupido sin puntería" de José Antonio Varela; son algunos de los títulos reflejados en las carteleras de las salas de cine.
Asimismo, el cine venezolano volvió a presentarse con éxito en 30 Festivales internacionales, que incluyeron su paso por Argentina, Bielorrusia, Brasil, Colombia, Ecuador, Eslovaquia, España, Estados Unidos, Francia, India, Italia, México, Polonia y Rusia.
El Gobierno de Venezuela amplió sus planes de financiamiento y se logró la exhibición de películas venezolanas en España, Bielorrusia, Bolivia, Grecia y la India.
Los Festivales Nacionales, también contaron con la asistencia financiera y en un año productivo para esta modalidad, se apoyaron nueve encuentros cinematográficos, en los estados Miranda, Bolívar, Sucre, Monagas y Zulia.
El 18° Festival del Cine Venezolano, guarda una significación especial para el país y la realización de su más reciente edición, rindió los resultados esperados. Con la alianza establecida con Fundearc y el apoyo de la Gobernación Bolivariana de Mérida, el festival retornó a su ciudad natal.
Asimismo, se propició la elaboración del Decreto N° 223, mediante el cual se declara patrimonio inmaterial, cultural y artístico al “Festival del Cine Venezolano de Mérida”.
Los proyectos especiales también resurgieron y se cuentan entre ellos: el podcast “Voces del cine Venezolano”, el acondicionamiento de la sala de cine del Teatro Alameda de San Agustín, el Programa de rescate y preservación del patrimonio fílmico, y el Proyecto de exhibición Cine Jardín Edmundo Aray en alianza con Pdvsa La Estancia.
Durante el año que termina, el CNAC, realizó la inspección técnica a 63 salas de cine de todo el país, mientras que se otorgó la certificación para 11 nuevas salas comerciales.
