En una entrevista con ABC News, el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, confesó estar «un poco asustado» con el uso que las personas le puedan dar a ChatGPT.
Altman dijo que está preocupado porque esos modelos pueden usarse para la «desinformación a gran escala» ya que esos sistemas pueden usarse para ataques cibernéticos ofensivos.
Sin embargo, destacó que el modelo puede ser la tecnología mas grande que se haya desarrollado hasta el momento.
El joven programador exhortó la necesidad de la sociedad de involucrarse lo más posible, considerando que la retroalimentación «ayudará a disuadir las consecuencias negativas» que la tecnología podría tener.
Con respecto a la critica que ha generado por el impacto en la oferta laboral, Altman respondió que sigue siendo una herramienta «bajo el control de humanos», y si bien eliminará algunos empleos, creará otros nuevos.
«La razón para desarrollar IA es en términos de impacto en nuestras vidas y mejora de nuestras vidas» agregó Altman.
Esta semana fue presentada la cuarta actualización del sistema, denominado GPT-4, que acepta imágenes y emite salida de textos que permiten chatear con el sistema, introduciendo archivos complejos, como libros para resumirlos.
El director ejecutivo de OpenAI, destacó que esperan hacer que los sistemas de Inteligencia Artificial se acerquen a la capacidad de razonar y no de memorizar.
Altman comparó la invención del ChatGPT con la llegada al mundo de la calculadora, y su impacto en la educación. «Cuando obtuvimos la calculadora, la forma en que enseñábamos matemáticas y en qué evaluamos a los estudiantes cambió por completo», agregó.
Finalmente, Altman expresó su deseo que los usuarios vean a ChatGPT como una herramienta. «Todos podemos tener un educador increíble en nuestro bolsillo que esté personalizado para nosotros, que nos ayude a aprender», concluyó.