En Ecuador hubo 227 femicidios durante 2021, el año más violento para las mujeres hasta el momento; pero en lo que va de 2022 la Fiscalía General del Estado suma 138 muertes violentas en la población femenina del país suramericano.
Por su parte, la ONG Alianza Feminista para el Mapeo de los Feminicidios de Ecuador dice que en los cinco primeros meses de 2022 se cuentan 118 femicidios.
Pero ¿qué es el femicidio o feminicidio? (se puede decir de las dos maneras); es conocido como el “asesinato de una mujer a manos de un hombre por machismo o misoginia.
También es considerada la forma extrema de violencia de género, causada por odio o desprecio a su condición de mujer, que degenera en su muerte, producidos tanto en el ámbito público como privado.
El femicidio es considerado superior a un homicidio ordinario, porque se trata de un crimen de odio hacia la mujer; entonces se presume, con base en evidencias, que el autor actúa por causas de odio –como agresión sexual o violación– a su género.
En Ecuador, de las muertes violentas por razones de género entre el 1 de enero y 31 de mayo de 2022, 53 corresponden a casos registrados en el seno familiar, íntimo, sexual o de otra índole, mientras que 5 fueron trans feminicidios (feminicidios por identidad de género o asesinatos de mujeres trans), en tanto que 60 ocurrieron por obra de la delincuencia organizada.
La Fundación Aldea, que integra la Alianza Feminista para el Mapeo de los Feminicidios, calcula que cada 30 horas y 31 minutos se produce un femicidio en Ecuador.
También se pudo conocer que 73% de los victimarios tenían vínculo sentimental con sus víctimas, 19 de las mujeres asesinadas habían reportado antecedentes de violencia, 4 de ellas tenían una boleta de auxilio y 9 sufrieron abuso sexual.
Además, 68% de las mujeres fallecieron por arma de fuego, 13% por arma blanca, 8% por manos de sus femicidas, 7% por otras razones, mientras que en 4% de los casos no se conocen las causas o armas empleadas contra ellas.
Un daño colateral -no menor- para estos femicidios es que significaron al menos a 89 niñas y niños huérfanos, pues 47 de las asesinadas eran madres.
Curiosamente, las provincias de Guayas (34 casos), Esmeraldas (15) y Manabí (13) presentan la mayor incidencia, a pesar de estar en estado de excepción decretado por el Gobierno ecuatoriano desde abril de este año.
La ONU Mujeres destaca que Ecuador es uno de los países con mayores niveles de violencia machista de la región y se encuentra entre los tres primeros con embarazo infantil y adolescente, en la mayoría de los casos producto de la violencia sexual.