Este martes el Comité Olímpico Internacional (COI) reiteró que las sanciones impuestas a los atletas de Rusia y Bielorrusia a raíz del conflicto en Ucrania “no son negociables”.
La declaración surgió horas después del pronunciamiento del Comité Olímpico Ruso, que exhortó al COI la venia que permita la participación de los deportistas rusos y bielorrusos en los juegos Olímpicos de 2024.
«Los rusos deben participar exactamente en las mismas condiciones que todos los demás deportistas. Todas las condiciones y criterios suplementarios no son bienvenidos, especialmente los que tengan un componente político absolutamente inaceptable para el Movimiento Olímpico», declaró Stanislas Pozdniakov, el presidente del Comité Olímpico.
Entre las medidas impuestas por el COI resalta la prohibición de mostrar banderas, himnos y colores de los símbolos nacionales de ambos países en eventos deportivos; la prohibición de organizar eventos deportivos en esos países, y la prohibición de invitar o acreditar a funcionarios de ambos gobiernos a los eventos de carácter deportivo internacional.
La posición del portavoz del COI contrasta con la de la propia entidad la semana pasada, cuando propuso una “hoja de ruta” para organizar el regreso de los deportistas de estos dos países «siempre que no hayan apoyado la guerra en Ucrania».
El COI informó en un comunicado que se debe «respetar el derecho de todos los atletas a ser tratados sin discriminación alguna, de conformidad con la Carta Olímpica». «Los gobiernos no deben decidir qué atletas pueden participar en qué competición y qué atletas no. No se debe impedir competir a ningún atleta solo por su pasaporte».
Esta declaración desató la ira del presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, afirmando que Kiev hará todo lo posible por impedirlo. «La neutralidad no existe en una guerra como esta», declaró.