La guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional anunció su disposición a dialogar con el gobierno de Gustavo Petro, que tomará posesión el próximo 7 de agosto.
El grupo insurgente emitió un comunicado luego de conocer la victoria del líder izquierdista en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Colombia, donde reafirma su voluntad a encarar los cambios para alcanzar la paz.
"El ELN mantiene activo su sistema de lucha y resistencia política y militar, pero también su plena disposición para avanzar en un proceso de paz que dé continuidad a la mesa de conversaciones iniciada en Quito en febrero de 2017", dice el comunicado del grupo guerrillero.
En el texto, la organización rebelde instó al presidente electo a tomar en cuenta “la inclusión política y económica”, además de una “economía soberana sin depredación” enmarcado en una “nueva doctrina de seguridad y derechos humanos”.
Petro, que se impuso ante su contrincante Rodolfo Hernández, llamó a la unión y diálogo a todas las fuerzas vivas del país. Ante tal situación, el ELN saludó el triunfo del líder del Pacto Histórico y reiteró su disposición a retomar las conversaciones de paz con el Ejecutivo, suspendidas por el presidente Iván Duque.
En el comunicado, la agrupación analizó que las dos causas que han impedido superar el conflicto armado y la violencia política en Colombia son “la Doctrina de Seguridad Nacional, que define a los opositores como enemigo interno, que prioriza el uso de la fuerza y desecha el diálogo para encarar los problemas"; y "el añejo régimen clientelar violento, mutado hoy en un sistema corrupto y mafioso".
Según la guerrilla, Petro sería respaldado por el movimiento popular pero indicó que si no cumple con sus promesas electorales, los jóvenes saldrán a la calle para reclamar cambios sociales con más fuerza que en 2019 y 2021.
La agrupación rebelde instó al Gobierno que se instalará el 7 de agosto a “superar el clientelismo y sacar la violencia de la política”, así como tener un nuevo modelo de lucha contra las drogas y darle continuidad al proceso de paz. Además, urgió a que la administración de Petro fomente planes de inclusión social que contemplen empleos y emprendimientos para la población colombiana.
Los diálogos de paz entre el ELN y el Gobierno colombiano se iniciaron en febrero de 2017 en Quito, Ecuador, bajo la presidencia de Juan Manuel Santos. Sin embargo, en 2018, el entonces presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció que su país dejaría de ser sede y garante de las conversaciones.
Los diálogos después tuvieron a La Habana, Cuba, como sede en 2018 sin lograr muchos avances. Al tomar posesión Iván Duque de la presidencia, condicionó la reanudación de las conversaciones a que la guerrilla liberara a las personas retenidas en su poder y suspendiera unilateralmente el fuego.
En enero de 2019, el mandatario suspendió definitivamente el diálogo, tras el atentado contra la Escuela de Cadetes Francisco de Paula Santander, en Bogotá, que dejó más de 20 fallecidos y 60 heridos.
Ahora, con la llegada de Gustavo Petro al Gobierno, existe alta probabilidad de que las conversaciones de paz se retomen. Petro es el primer presidente de izquierda de Colombia, luego de haber sido guerrillero del M-19, ser uno de los firmantes de la desmovilización de ese grupo y sumarse a las fuerzas políticas que nacieron de ese acuerdo de paz, como los partidos Polo Democrático y Colombia Humana.