Más de la mitad de la población estadounidense prefiere darle prioridad a la toma de decisiones para fortalecer la economía de su nación, antes de destinar recursos para atacar a Rusia, en el contexto de la operación militar especial que desarrolla ese país en Ucrania.
Una encuesta de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research (AP-Centro NORC para la Investigación de Asuntos Públicos), concluyó que 51% de los estadounidenses considera que debería limitarse el daño a la economía nacional, mientras 45% cree que la prioridad de la nación debe ser sancionar a Rusia de la manera más efectiva posible.
Este resultado corresponde a consultas realizadas en el mes de mayo y contrasta con uno similar de abril, cuando las cifras eran exactamente inversas; analistas de la nación sostienen que este resultado pudiera deberse a la elevada inflación y aumento de los precios de la gasolina en EE.UU., lo cual limita la disposición de la gente a apoyar financieramente la guerra en Ucrania.
Estos datos se suman a que esta semana 57% de los votantes desaprobaron la gestión del presidente Joe Biden, nuevo mínimo desde que asumió el mando en 2021, y a sólo seis meses de las elecciones legislativas de mitad de período, en las que los demócratas ven el escenario muy complicado.
Sin embargo, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, aseguró que las sanciones impuestas a Rusia no provocaron la subida de los precios internacionales de los alimentos como consecuencia de la caída de las exportaciones, por lo que rechazó un eventual relajamiento de esas restricciones.
La población determinará con sus votos qué nivel de credibilidad le dan a esas afirmaciones y acciones gubernamentales, mientras se observa que desde el momento en que Washington y sus aliados iniciaron el paquete de sanciones contra Rusia, las consecuencias a escala global son muy grandes por el peso de la importaciones provenientes de Rusia en los sectores de alimentos, hidrocarburos y otros materiales.