El expresidente boliviano, Evo Morales denunció este lunes el robo de su teléfono celular, durante un evento del Mas, partido político en el que hace vida. En el encuentro se encontraba el ministro de Interior del país suramericano. El hecho causó revuelo en Bolivia.
A través de la red social Twitter, Morales, hizo la denuncia y lo calificó como un nuevo ataque en su contra.
"El robo de mi teléfono celular ocurrió en un acto que contaba con la presencia del ministro de Gobierno y su personal policial de seguridad", afirmó.
De igual manera insinuó que esto pudiera ser un plan para atacarlo nuevamente. “No quisiéramos pensar que es parte de un ataque planificado para perjudicarnos", dijo.
La actividad en la que ocurrió el robo tuvo lugar en un poblado del departamento de Santa Cruz, principal escenario de la oposición al Movimiento al Socialismo (MAS). Morales, quien estuvo rodeado de militares, ofreció allí un discurso improvisado para la militancia.
También señaló que desde que los miembros de su partido empezaron la lucha política en defensa de su pueblo “ante gobiernos neoliberales”, han sufrido “ataques y campañas de guerra sucia con mentiras”.
El ex gobernante también indicó que no tiene "nada que ocultar", pero que de igual manera denunciará cualquier intento de usar montajes o tergiversar la información de su teléfono en su contra.
Además del robo del celular de Evo Morales, el líder indígena alertó del robo de dos celulares de sus asistentes de comunicación en el mismo acto.
El exmandatario ya ha manifestado con anterioridad críticas contra el ministro de Interior y Justicia Eduardo del Castillo. Incluso desde el partido MAS se ha pedido al presidente Arce su destitución.
Por otra parte, desde la oposición le han restado importancia al robo y denunciaron un exceso de movilización policial para esclarecer este asunto.