El capitán Ibrahim Traoré de 34 años, fue nombrado este miércoles como el presidente de Burkina Faso, convirtiéndose oficialmente en el mandatario más joven del mundo, luego de liderar el pasado viernes, un golpe de Estado en el país de África Occidental.
A través de un comunicado oficial, pronunciado por el portavoz del oficialista Movimiento Patriótico por la Salvaguardia y la Restauración (MPSR), el capitán Kiswendsida Farouk Azaria Sorgho, informó que Traoré ha sido nombrado "jefe de Estado, jefe Supremo de las Fuerzas Armadas".
El cambio de gobierno por la fuerza de la semana pasada, el segundo en ocho meses, fue un eslabón más de una larga cadena de golpes de Estado que viene registrándose durante la última década en África, aunado a una insurgencia yihadista que ha provocado miles de muertos y millones de desplazados.
Este país vive desde el año 2015, intensos ataques realizados por grupos ligados a Al Qaeda como al Estado Islámico, cuyas acciones afectan a diez de las trece regiones del país africano, especialmente al norte.
En este sentido, Traoré, quién era el jefe de cuerpo del Regimiento de Artillería de Kaya, en el norte del país, vivió de cerca los múltiples ataques realizados por los yihadistas.
También una parte del territorio se escapa del control de los poderes del Estado, en especial en las regiones fronterizas de Malí y Níger, países también enfrentados a la violencia de grupos subversivos.
Es por eso, que al frente de un grupo de jóvenes oficiales descontentos, Traoré derrocó al teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba que había tomado el poder en enero del presidente electo Roch Marc Christian Kaboré.
Debido a este alzamiento militar, Damiba huyó a Togo el domingo.
Mientras tanto, este martes Traoré sostuvo un encuentro con una delegación de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), que también se reunió con líderes religiosos y tradicionales en la que abordaron temas sobre el restablecimiento del orden constitucional, entre otros tópicos.
Analistas internacionales temen que Traoré siga los pasos de otros países de herencia francesa de África, para estrechar lazos con Rusia. Esto coincidió con violentas protestas frente a la embajada de Francia en Uagadugú.
Traoré aseguró que mantendrá el calendario propuesto por el expresidente Damiba para establecer un gobierno civil a mediados de 2024.
