La doctrina Monroe que intenta mantener el dominio de Estados Unidos en el continente bajo la premisa de “América para los americanos”, es rechazada por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, según confirmó su canciller Marcelo Ebrad, a propósito de la 9a. Cumbre de Las Américas.
En ese evento que se desarrolla entre el 6 y 10 de junio en Los Ángeles, el ministro de Relaciones Exteriores de esa nación latinoamericana, habló en nombre de su presidente, el ausente Andrés Manuel López Obrador .
Ebrard expuso las ideas del mandatario mexicano en ese lugar al que López Obrador no acudió en protesta por la exclusión que hizo el presidente de EE.UU., anfitrión de la Cumbre, Joe Biden, a Cuba, Nicaragua y Venezuela, países que no invitó fundamentado en su doctrina ideológica y geopolítica.
En tal sentido, abogó por un nuevo “panamericanismo, fundado en el respeto para todas las naciones y que derive en mejores condiciones de bienestar para nuestros pueblos”.
“Lo que está haciendo México es recuperar su mejor tradición de política exterior, aquella que pondera el respeto al derecho internacional y cuya piedra angular es la defensa del no intervencionismo, ambos elementos fundamentales cuando se aspira a erigir una arquitectura continental renovada”, pronunció Ebrard.
El canciller mexicano aseguró que la exclusión de países de este tipo de mecanismos no sólo está en contra de los principios de México, sino que además resulta inconsistente, “por no decir contradictoria, con la realidad que prevalece en la membresía de la mayoría de las organizaciones de gobernanza global”
Para el alto funcionario mexicano, por principio, ningún país tendría el derecho de excluir a otro de la participación, “la membresía en la Cumbre de las Américas no es —ni ha sido— una prerrogativa del país anfitrión” aclaró.