Los gobiernos de Panamá y Ecuador, ambos en conflicto con diferentes sectores de la sociedad civil y pueblos indígenas, retomaron sus respectivas mesas de diálogos, con el propósito de llegar a acuerdos.
En el caso del país centroamericano, el panorama parece más complejo, ya que aunque se está realizando el encuentro, varias organizaciones denunciaron que no hay voluntad por parte del Ejecutivo, poder que califican de corrupto.
Corrupción
Protestantes panameños insistieron en que deben discutir los temas de corrupción, ya que el gobierno se adhiere a los intereses de los “oligopolios y el empresariado privado”, como denunciaron al medio Prensa Latina, las organizaciones Pueblo Unido por la Vida y por los Derechos del Pueblo Organizado, la comarca Ngabe Buglé y campesinos del oriente de Chiriquí.
En relación a la inflación en alimentos, los acuerdos se han limitado hasta el momento, a reducir el 30% del costo de la canasta básica, colocando precios topes a los productos, así como el subsidio para su producción, y reducción de impuestos en la comercialización, como se informó a finales de julio.
Sin embargo en ese momento el dirigente de la Alianza Pueblo Unido por la Vida, Saúl Méndez, subrayó que aún faltaba discutir “un acuerdo objetivo y real frente al abuso de la patronal y los empresarios contra el pueblo incrementando los precios de forma indiscriminada”, como reportó LMN.
A la calle
A pesar de que la mesa de diálogo continuará, algunas organizaciones informaron que retomarán las protesta, como lo hicieron en julio. Méndez dijo que este jueves volverán a las calles, porque aún no hay respuestas en temas neurálgicos como la inclusión de 72 productos de la canasta básica en las medidas de control y rebaja de precios.
Las protestas en Panamá comenzaron en el mes de julio, después de una inflación sin precedentes y el incremento de los precios del combustible, que generó el cierre de vías y la unión de gremios de educación, comunidades indígenas, entre otros sectores que exigían mejoras.
Ecuador
A la mesa de diálogo volvieron también representantes del gobierno de Ecuador y las diferentes organizaciones de pueblos originarios, en la que esperan llegar a acuerdos que mejoren la calidad de vida de los indígenas, en temas como la educación, acceso a la salud, propiedad de las tierras, situación económica, entre otras.
Esto se da luego que organizaciones como la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) la Federación de Organizaciones Indígenas, Campesinas y Negras (Fenocin), entre otras, iniciaran una huelga que se extendió por tres semanas, y que dejó un saldo de al menos cinco manifestantes muertos, 90 personas heridas y 87 detenidos.
Las manifestaciones se detuvieron, luego de un acuerdo firmado entre el gobierno de Guillermo Lasso y las organizaciones indígenas, con la mediación de la iglesia católica, pero con la condición de entablar una mesa de negociación.
Después de diferentes contratiempos, que incluyeron un incidente violento registrado en la provincia amazónica de Sucumbíos cuando supuestos manifestantes atacaron a una caravana de combustible, este jueves vuelven a discutir diez ejes temáticos.
El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, informó que se instalará una “mesa de Fomento Productivo”, para tratar el “Impacto de políticas de libre comercio en el sector agrícola, políticas de fomento productivo a la agricultura familiar campesina, intermediación y estructura de precios y control de precios sobre las regalías de producción de flores” como expuso a través de su Twitter.
