Este miércoles el parlamento de Finlandia aprobó por adelantado el ingreso a la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) pese a que Hungría y Turquía deben dar su beneplácito.
Los legisladores finlandeses aprobaron la ley con 184 votos a favor y siete en contra de la entrada del país europeo a la alianza militar.
La moción contó con el apoyo casi unánime de los partidos de Finlandia, incluso el de aquellos que estaban en contra del ingreso a la alianza, antes del inicio de la guerra en Ucrania.
Sin embargo, los siete votos en contra se dividieron entre los partidos de extrema derecha y extrema izquierda que argumentaron la falta de garantías para evitar que se instale armamento nuclear en el territorio.
Ni cortos ni perezosos, el gobierno finlandés comenzó este martes la construcción de una valla metálica de tres metros de altura y 200 kilómetros de longitud en su frontera con Rusia. Los alambres de púas, cámaras de visión nocturna, farolas y altavoces serán ahora parte de ese paisaje con nuevas disposiciones que apuntan a lograr “seguridad”.
El ministro finlandés de Defensa, Antti Kaikkonen, celebró la decisión y señaló que es un paso importante hacia la OTAN. “La seguridad de la OTAN es una causa común” agregó.
Tradicionalmente Finlandia había mantenido desde los años 90 una postura de no alineamiento militar por su histórica política de neutralidad, sin embargo, la incursión bélica de Rusia en Ucrania precipitó la decisión.
Aún falta que el presidente finlandés, Sauli Niinistö, ratifique el acuerdo y que posteriormente Hungría y Turquía refrenden el apoyo al nuevo ingreso. Estos son los dos únicos países que no han aprobado el ingreso.
Turquía había suspendido las conversaciones en enero tras varias manifestaciones antiturcas y contra el Islam en la capital finlandesa.
Sin embargo, este martes el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, anunció un encuentro entre Finlandia, Suecia y Turquía la próxima semana en la sede de la OTAN para desbloquear la adhesión de los dos candidatos a ingresar en la organización.
Las negociaciones están trabadas desde hace meses por las reservas del gobierno turco que argumenta falta de cooperación en la lucha contra el terrorismo de grupos kurdos.