Una copa de vino al día, ¿bueno o malo?

Foto: freepick

Finalmente llegó la hora de estar en casa luego de un fuerte día de trabajo, abres la puerta, te despojas de tus prendas, tomas un baño y sales a preparar la cena pero en el transcurso te das cuenta que falta algo importante, la cereza del pastel; un poco de vino. Así que buscas una copa, sacas la mejor botella que tengas para servir y disfrutar del resto de la noche…Eso es lo que vemos en las películas hollywoodenses pero ¿una copa de vino al día es positivo o negativo para nuestra salud?

Iniciemos por la raíz de la pregunta: la preparación del vino. La base de la elaboración no ha variado desde su inicio hace más de 6.000 años, el método y la técnica es la misma para el vino tinto, blanco o rosado, lo único que puede variar es el tiempo de fermentación y temperatura.

Primero se corta la uva con tijeras especiales que solo cortan el racimo, luego, las uvas se colocan en la estrujadora para extraer el jugo. Posteriormente el resultado del estrujado y prensado es guardado en barrica de acero inoxidable, en el que se les coloca levadura para que el azúcar del mosto se convierta en alcohol, un proceso llamado fermentación que dura 10 días.

En el caso del vino tinto, el color es uno de los atributos más importantes que condiciona su calidad ya que la intensidad del color determina sus defectos y virtudes así como el potencial de evolución con el tiempo. Son muchas las sustancias responsables del color del vino, entre las más importantes están los polifenoles, presente en las uvas tintas.

Estas polifenólicas ejercen un efecto antioxidante en el organismo, ayudando a reducir las grasas y el colesterol, previene la depresión y tiene efectos cardioprotectores.

¿Qué es la dieta mediterránea?

Esta dieta es una forma de alimentación basada en las cocinas tradicionales de Grecia, Italia y otros países que bordean el mar Mediterráneo.

Los alimentos de origen vegetal, como cereales integrales, verduras, legumbres, frutas, frutos secos, semillas, hierbas y especias, son la base de la dieta y el aceite de oliva es la principal fuente de grasa agregada.

Algunos científicos incluyen una copa o dos de vino diarias dentro de la tierra mediterránea debido a sus componentes antiinflamatorios.

‘’Paradoja Francesa’’

Estudios científicos relacionan el consumo de vino con buena salud y longevidad. Sin embargo, a fines de los 80 surgió el interés por sustentar estos datos luego de que se describió la ‘’Paradoja Francesa’’.

Esta paradoja inició a inicios del siglo XIX, cuando un científico irlandés, Samuel Black, notó que los franceses sufrían menos ataques al corazón que los ingleses y otros europeos y eso a pesar de que su dieta mediterránea era mucho más rica en grasas saturadas.

Black bautizó su estudio como la ‘’paradoja francesa’’ y lo atribuyó a los efectos positivos del vino tinto, que los franceses bebían con notable alegría.

Si la dieta mediterránea incluye principalmente el vino y los franceses tienen baja incidencia de mortalidad cardiovascular a pesar de su alimentación, ¿esto quiere decir que el vino es positivo para nuestra salud? Es aquí donde comienza el debate.

Lado positivo

Los estudios continuaban demostrando que los franceses tenían estadísticamente mejor salud cardíaca que suecos, daneses, holandeses o alemanes; por lo tanto, era viable que existieran diversos componentes del vino que ayudaran a reducir el riesgo cardiovascular si era ingerido de forma moderada.

Esto se debe principalmente a los polifenoles, los cuales intervienen en la fijación de los radicales libres del colesterol malo, haciéndolo menos soluble, impidiendo su absorción intestinal y con ello su paso a la sangre, evitando que el colesterol se acumule en las arterias. Además, los polifenoles favorecen el colesterol llamado bueno, que no tiene tendencia a acumularse en las arterias.

Pero los descubrimientos respecto a las virtudes del vino no se detuvieron aquí, sino que se halló un componente con dos ciclos aromáticos llamado resveratrol que se produce normalmente como respuesta inmunitaria en las plantas tras una agresión o infección.

El resveratrol, que también se acumula en la piel y sobre todo en la semilla de la uva y por tanto pasa al vino, fue elegido como componente mágico que explicaba las virtudes curativas de los caldos tintos.

Pero esto no acaba aquí, ya que muchos estudios determinaron que el alcohol, en cualquier cantidad, no es bueno para la salud.

Lado negativo

Parece cierto que el alcohol reduce el riesgo de algunas enfermedades, pero solo a partir de cierta edad, 45 años en hombres y 55 en mujeres. Lo que no está claro es que este beneficio compense los riesgos que una ingesta diaria de alcohol trae consigo.

Las investigaciones que van en contra de la ingesta diaria de vino, examinaron los datos médicos de casi 400.000 personas a través del U.K Biobank, una base de datos de Reino Unido que contiene información genética, de estilo de vida y de salud.

Los resultados arrojaron que incluso una ingesta baja de alcohol se relacionó con un pequeño aumento del riesgo de problemas cardiovasculares, como hipertensión y enfermedad de las arterias coronarias, un riesgo que aumentó exponencialmente con un consumo más intenso.

Krishna Aragam, autor principal del estudio y cardiólogo del Hospital General de Massachusetts (EE.UU.) dijo que las personas más propensas a beber cantidades bajas o moderadas de alcohol también parecían estar más preocupadas por la salud que las que se abstienen de consumirlo, ya que fumaban menos, hacían más ejercicio y comían de manera más saludable. Eso ayudaría a explicar por qué varios estudios anteriores habían asociado un consumo moderado de alcohol con una buena salud del corazón.

Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS), se limitó a enfatizar que el alcohol es causante del 6% de las muertes anuales en todo el mundo, y que beber, aunque sea poco, aumenta el riesgo de cáncer y deteriora el funcionamiento de algunos órganos, especialmente el hígado.

Para la Organización Mundial de la Salud, un consumo de 20 a 40 gramos diarios de alcohol en mujeres y de 40 a 60 diarios en varones, ya es un consumo de riesgo. Por lo que superar estos niveles se considera consumo perjudicial.

Líderes en venta

Los últimos datos registrados sobre la exportación de vinos arrojaron que el comercio internacional del producto era dominado por los tres países de la Unión Europea: España, Italia y Francia, los cuales vendieron 21.000 millones de euros en exportaciones mundiales de vino.

El porcentaje en volumen de estos tres países, juntos, ha experimentado un importante aumento de 540 millones de litros con respecto a 2020.

Por otra parte, el consumo de vino tuvo un alza el pasado año debido al levantamiento de restricciones por la pandemia, por lo cual, se normalizó la circulación de personas y mercancías, la reapertura de los canales de hostelería y la reanudación de las reuniones y celebraciones, las cuales generaron un aumento en el consumo a nivel mundial.

Liderando la lista se encuentra Estados Unidos con 3.310 millones de hectolitros consumidos, le siguen Francia e Italia con 2.520 y 2.420 millones de hectolitros. Luego, en la lista se encuentran Alemania, Reino Unido, España y China.

Puede evidenciarse que hay un 50/50 de opiniones acerca de si es bueno o malo beber una copa de vino al día. Sin embargo, podemos resumirlo en:

  1. La clave está en la moderación.
  2. Una copa pequeña de vino diaria durante las comidas es buena a partir de una cierta edad para prevenir el riesgo de problemas cardiovasculares.
  3. Preguntarle a nuestro doctor es lo más recomendable.

Redacción
Redacciónhttp://lamoscanews.com
Somos un medio digital independiente que nació de un colectivo de periodistas y creadores de contenido de diferentes países de Latinoamérica.

Articulos relacionados

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Sigue en contacto a través de

0SeguidoresSeguir
Lamoscanews.com Lamoscanews.com Lamoscanews.com Lamoscanews.com

Lo más reciente